Los celtas creían que la puerta al inframundo se abría el 31 de octubre y que los muertos regresaban para aterrorizarlos, de ahí que crearan un festival para protegerse.

Estamos celebrando en éstas fechas el día de muertos en México, pero no solo eso, también en las últimas décadas, Halloween y Día de Muertos se han ido fusionando en México, esto no quiere decir que la tradición mexicana vaya a desaparecer, al contrario.

Desde los ochenta, la influencia de Halloween ha ido en aumentando de forma gradual en nuestro país, es muy común comenzar a buscar el disfraz más original.

Los niños se preparan para gritar afuera de las casas dulce o turco, esta fusión surge por múltiples factores, ahora Halloween se vive en países latinoamericanos, incluyendo la cercanía de México a Estados Unidos, donde la aterradora festividad es popular en la industria cinematográfica.

Por encima de la influencia de los dos festivales, el Día de Muertos y el Halloween son muy diferentes a pesar de su cercanía en el calendario, Halloween tuvo su origen en tradiciones celtas y paganas de Irlanda y Escocia hace 2 mil años.

Los celtas creían que la puerta al inframundo se abría el 31 de octubre y que los muertos regresaban para aterrorizarlos, de ahí que crearan un festival para protegerse.

El Día de Muertos mexicano, originado entre las culturas indígenas hace 2 mil 500 o 3 mil años, actualmente se celebra para recordar a los seres queridos fallecidos el 1 y el 2 de noviembre.

En México, el Día de Muertos se celebra en la mayoría de los hogares con una mezcla de elementos religiosos modernos y tradiciones indígenas. En el altar de la casa, se coloca un crucifijo entre calaveras pintadas, se coloca alimento, incienso y fotografías de familiares y amigos muertos.

Las “fiestas” de Día de Muertos se realizan en los cementerios, donde las familias se reúnen y decoran cementerios con flores de cempasúchil y velas al ritmo de la música tradicional.

Las familias creen que si los espíritus están felices los protegerán y les darán buena suerte.

En los últimos años, Halloween se ha convertido en la segunda festividad más comercial del mundo después de Navidad. Se han puesto en negocios y calles adornos y se venden cada vez más mercancía de Halloween como sombreros de bruja, diablos, orejas de gato, dientes de vampiro y maquillaje zoombie.

El principal objetivo tanto de Halloween como de Día de Muertos es divertirse, ya sea espantando a tus amigos o recordando a tus seres queridos.

Ambas celebraciones, al igual que muchas otras como Navidad o Pascua, ya no son puras. Se han mezclado o fusionado en el transcurso de los años y las generaciones.

@cronicabanqueta

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