La real orden se cumplió por instrucciones del virrey don Antonio de Mendoza y el escribano realseñaló primero el sitio donde debía edificarse el convento

Una vez consumada la alianza entre varios pueblos mesoamericanos con los hispanos, inicia la conformación de lo que con el tiempo sería llamado Virreinato de la Nueva España.

Así, los principales señores Tecoactzincas, aliados de la corona hispana, viajaron al capital de reino y obtuvieron mercedes reales concedidas en la Real Cédula del 20 de mayo de 1528 para fundar el pueblo de san Luis Huamantla en un valle de la ladera noreste del volcán Matlalcueye Malintzín o La Malinche.

Pasaron seis años y la real orden se cumplió por instrucciones del virrey don Antonio de Mendoza el 18 de octubre de 1534, cuando Don Juan Ventura de Honduras, juez y gobernador de Tlaxcala; alcalde Don Ascencio de Molina y el escribano real, público y de Cabildo, Don Ventura de Meto, en presencia de los caciques, señaló primero el sitio donde debía edificarse el convento y las tierras donde se fundaría el pueblo de San Luis Huamantla.

Se dio posesión de los solares, un mil 14 cordeles de largo y ancho a cada uno, correspondientes a los fundadores nombrados por su majestad, señores: don Juan Maldonado y Paredes en el barrio de San Lucas detrás de la iglesia (sic) de san Francisco, hoy san Francisquito; don Juan Rafael Tenorio en el Barrio de Santa Cruz y “trajeron al señor san Miguel para hacerle su templo en las mismas tierra de don Juan Rafael Tenorio y Cortéz”.

En la orilla del Monte (La Malinche) igual cantidad de cordeles a don Alonso Muñoz Camargo.

A don Francisco Tenocpalzin y Antonio de Valencia, un mi 14 cordeles de largo y ancho a cada uno en el barrio de san Lucas.

A don Lucas García los mismos cordeles, al igual que a don Eugenio Leal Chocolatzín, del barrio de San Cruz y a don Juan de Aquino, del barrio de san Lucas.

Fuente: “Lienzos de la fundación de Huamantla”, Meade Mercedes, Cesorecuh y Gobierno de Tlaxcala, México,1984.

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