Las organizaciones indígenas señalan a autoridades y representantes de Minera Autlán como los probables responsables de la desaparición de su compañero

Desapareció uno de los activistas indígenas y opositor al proyecto de Minera Autlán, Sergio Rivera Hernández, por lo que el Movimiento Agrario Indígena Zapatist (MAIZ) y Comunidades Nahuas en Resistencia de la Sierra Negra exigieron a las autoridades su presentación con vida.

En un pronunciamiento circulado esta mañana, la organización MAÍZ demandó a la Secretaría de Gobernación de Puebla y al mandatario José Antonio Gali Fayad que instruyan investigaciones y advirtió que podrían estar implicados tanto autoridades municipales como funcionarios de la minera.

Pobladores acusaron tras la denuncia pública, que las autoridades siembran un clima de terror en la región y pusieron de ejemplo que el inspector de Coyolapa, Isaias Montalvo Adán, se trasladó hasta la casa de Sergio, para amenazar a su esposa y exgirle que desista en su denuncia ante autoridades poblanas.

Integrantes de MAIZ identifican Montalvo Adán como empleado de Victorino Téllez miembro de la UNORCA y dueño de la Cafetería Sierra Negra en la ciudad de Tehuacán quien se ha desempeñado como es promotor de Minera Autlán.

En la relatoría de hechos señalaron que ayer, como a las seis de la tarde, en la carretera que llega a la comunidad de Tepexilotla camino a su comunidad de Tepetolonzi, Coyolapa Sierra Negra —en el municipio de San Pablo Zoquitlan—, Sergio fue visto por última vez sobre su motocicleta perseguido por una camioneta Nissan Blanca con caja seca.

Más tarde pobladores encontraron su motocicleta arrollada a la altura de la desviación a la comunidad de Zaragoza sin ninguna señal de él.

Aunque la comunidad se organizó para peinar la zona en búsqueda del defensor del territorio que duró horas, no tuvieron éxito, por lo que aún continúa la jornada para su hallazgo hoy viernes.

El defensor del territorio que se ha manifestado abiertamente contra la imposición del proyecto minero que ha promovido la Secretaría de Energía (SENER) para favorecer a Minera Autlán, antes de este hecho sufrió en dos ocasiones agresiones de intento de asesinato y golpes que fueron denunciados sin que avanzaran las investigaciones ni se castigara a los responsables a la fecha.

Los integrantes de MAIZ denunciaron también que en los últimos meses es evidente la complicidad del crimen organizado, pues pobladores de los territorios originarios y ecologistas son hostigados, amedrentados y amenazados por pistoleros para que acepten la construcción del proyecto minero.

Asimismo, acusaron que la trasnacional Autlán y sus planes extractivos son promovidos por las autoridades municipales como el presidente de Tlacotepec de Díaz, Cirilo Trujillo, y de San Pablo Zoquitlan, Fermín González León.

“Al presidente de Tlacotepec de Díaz, Cirilo Trujillo y Fermín González León, de San Pablo Zoquitlan los hacemos responsable de lo que le pase a nuestro compañero, estas autoridades han provocado un clima de tensión y ruptura del tejido social, así como enfrentamientos entre los mismos pobladores, en lugar de funcionar como representantes sociales se han comportado como testaferros y se han arrastrado a las órdenes de la minera Autlán”, aduce el pronunciamiento.

En la acusación pública, integrantes de MAIZ narraron que en el mes de junio en ese mismo lugar donde hoy se encontró la motocicleta de Sergio, guardias blancas y paramilitares del PRD-PAN en el que participaron Zaire Montalvo Avendaño, candidato a regidor dentro de la planilla a la alcaldía de Zoquitlan y su hermano Caín, así como Victorino Tellez Carrillo, dirigente de UNORCA en Coyolapa y empleado de la Minera Autlan, empresa que quiere construir una presa hidroeléctrica en Coyolapa y Pozotitla, con armas largas montaron un retén ilegal y agredieron a Sergio Rivera Hernández, Hugo Alba Cortes y Evaristo Torres cuando regresaban de una jornada de trabajo, por lo que fue interpuesta una denuncia ante la Fiscalía General del Estado.

Comunidades Nahuas en Resistencia de la Sierra Negra y la Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán en esa ocasión se pronunciaron por las graves violaciones a defensores del territorio que fueron golpeados y amenazados de muerte.

En las declaraciones ante la FGE señalan que los defensores fueron detenidos por el retén y obligados a bajar de su automóvil. Fueron revisados y sin que hubiera resistencia, le dieron un cachazo en la cabeza a Hugo Alba, activándose el arma y realizando una detonación en ese momento.

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