Es una pieza muy especial, ya que Miguel Ángel ordenó acabar con todos sus dibujos tras su muerte. Incluso, él mismo quemó muchas de sus obras en una hoguera.

Cuando en 2019 Timothy Clifford, gran especialista en el Renacimiento y director de las Galerías Nacionales de Escocia de 1984 a 2006, vio ‘El hombre sentado’ que le mostraba un coleccionista británico no tuvo duda de su autoría: Miguel Ángel. El especialista fechó el dibujo en 1487, lo que lo convertía en el más antiguo realizado por el artista italiano descubierto hasta la fecha y uno de los pocos que se salvó de la obsesión por destruirlos que persiguió al autor durante toda su vida.

‘El hombre sentado’, una de las escasas obras del maestro del Renacimiento en manos privadas, será subastado por Christie’s el próximo 18 de mayo con un precio estimado de 30 millones de
euros. Reproduce a un hombre tembloroso representado en un fresco, ‘Bautismo de los neófitos’, de Masaccio.

«Muestra a Miguel Ángel haciendo dos cosas al mismo tiempo, mirando hacia atrás a los artistas que le precedieron, en este caso particular Masaccio, así como mirando hacia adelante a su propia obra y el aspecto revolucionario de la misma -en particular la representación del cuerpo humano que se convierte en una parte tan importante tanto en las esculturas, pienso en el David de Florencia, o las muchas, muchas figuras que pintó en la Capilla Sixtina«, ha señalado en un comunicado Stijn Alsteens, jefe internacional del departamento de dibujos de maestros antiguos de la casa de subastas británica.

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El joven artista se inspiró en un colosal fragmento de mármol romano, que originalmente formó parte de la mitad inferior de una estatua del conjunto ‘Júpiter entronizado’. En esa época, Miguel Ángel entró como aprendiz en el estudio de Domenico Ghirlandaio, entonces uno de los grandes maestros italianos de su tiempo, que quedó deslumbró por su talento precoz.

Y además de su juventud, el boceto adquiere gran relevancia por ser uno de los pocos que han sobrevivido al maestro del Renacimient. Miguel Ángel ordenó acabar con todos sus dibujos tras su muerte. Una tarea de la que él mismo se ocupó en parte poco antes de fallecer, ya que se encargó de quemar en una hoguera una groan cantidad de ellos.

El dibujo fue vendido en 1907 en París y facturado como una obra de la escuela de Miguel Ángel. Quedó en el olvido hasta 2019, cuando fue reconocido como una de las obras de Miguel Ángel. ‘El hombre sentado’ había sido designada como tesoro nacional francés, lo que impedía su exportación, pero el gobierno galo ha retirado recientemente esa designación.

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