El refrigerio escolar debe cubrir el 15 por ciento de aporte diario de energía y nutrimentos, su elaboración debe contemplar frutas y verduras, cereal integral, leguminosas y agua natural.


La Secretaría de Salud en el estado (SESA) recomienda a los padres de familia elaborar para el regreso a clases un lunch que incluya alimentos nutritivos que permitan retomar a los infantes hábitos saludables de alimentación.

Claudia Ivette Torres Soria, responsable del Programa Alimentación y Actividad Física de la SESA, señaló que los refrigerios o colaciones que se integran como parte de la dieta de los escolares deben proveerles de los nutrimentos y energía necesarios entre las comidas principales, para evitar lapsos de ayuno de más de cuatro horas y mantener la saciedad en su apetito.

La especialista explicó que el refrigerio escolar debe cubrir el 15 por ciento de aporte diario de energía y nutrimentos; además, su elaboración debe contemplar frutas y verduras, cereal integral, leguminosas y agua natural a libre demanda.

La funcionaria recomendó que en las escuelas se fomente el consumo de alimentos y bebidas que favorezcan los hábitos saludables de alimentación en los estudiantes.

Se recomienda incluir en cada comida alimentos de los tres grupos de “El Plato del Bien Comer” (verduras y frutas, leguminosas y alimentos de origen animal y cereales), que su consumo habitual no implique riesgos para la salud y que estén libres de microorganismos patógenos, toxinas y contaminantes; además, que se consuma con mesura y que no aporte cantidades excesivas de ningún componente o nutrimento.

Es importante que los padres de familia vigilen que los alimentos cubran las necesidades de los menores para que crecimiento y desarrollo sea correcto y que incluya alimentos diferentes de cada grupo acorde con los gustos de quien los consume.

Finalmente, Claudia Ivette Torres Soria recordó que el refrigerio es una porción de alimento más pequeña que las comidas principales, por lo que se recomienda consumirlo a media mañana y a media tarde para que contribuye a mantener la energía que el cuerpo utiliza para realizar sus actividades, ya que los niños gastan mucha energía en la escuela al estar estudiando o a la hora del recreo, por eso requieren de un pequeño refrigerio para reforzar las reservas de energía que necesitan.