La reapertura del campus desbloqueó la Recta a Cholula, la cual mantuvieron bloqueada los estudiantes más de tres horas

Las puertas de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap) se reabrieron poco después de las 8:00 de la noche de este martes, tras una resolución judicial emitida horas antes a petición de la Fundación Mary Street Jenkins.

Los elementos de una empresa de Seguridad Privada recibieron la instrucción de separar los portones de sus marcos, después de que recibió la notificación el nuevo Patronato de la Fundación Udlap, encabezado por Guillermo Jenkins, según un comunicado de su apoderado legal, Rodrigo Gurza Cárdenas.

Ante esta acción, en redes sociales creció el exhorto en diferentes cuentas a la comunidad universitaria de abstenerse de entrar a las instalaciones y esperar la llegada de las autoridades administrativas, encabezadas por la rectora interina Cecilia Anaya Berrios.



La reapertura del campus desbloqueó la Recta a Cholula, la cual mantuvieron cerrada los estudiantes más de tres horas, como una forma de protesta porque las actividades presenciales en esta casa de estudios estaban suspendidas desde el 30 de junio del año pasado.  

En el acceso principal, los manifestantes explicaron a los uniformados que no entrarían al campus, hasta que lo autorizara Anaya Berrios o algún otro directivo identificado con la casa de estudios.



Este martes en la noche, la rectora interina de la Universidad de las Américas Puebla, Cecilia Anaya Berrios, consideró que la resolución judicial emitida para reabrir el campus «trata de legitimar» al otro grupo; por tanto, pidió que la jueza les entregue las instalaciones.

Asimismo, a través de un video difundido en redes sociales, acusó al nuevo Patronato de la Fundación Udlap, que designó como su rector a Armando Ríos Piter, de tratar «de apoderarse de la operación académica, sin contar siquiera con los atributos legales o estatutarios».

Desde su punto de vista, «ninguna autoridad del Poder Judicial de Puebla está por encima de los mandatos del Poder Judicial de la Federación»; por tanto, «vemos con preocupación que la respuesta al reclamo de la comunidad universitaria y de la sociedad en general es nuevamente una simulación y ofensa a nuestra inteligencia«.

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