En vísperas de Navidad, María Fernanda Rodríguez Alonso, de 25 años y víctima de violencia vicaria, se quedó en la calle con sus hijos Gustavo de ocho y Esmeralda de nueve años. María de Lourdes Alonso Tamayo, de 47 años, la madre de Marifer y abuela de los pequeños, los corrió de su casa por temor a que Juan Manuel “N”, la expareja de su hija, cumpla sus amenazas de asesinarla a ella o desaparecer a su hijo de 16 años.

El 8 de marzo de 2022 este hombre, apoyado por su madre Juana “N”, quien es conocida porque su familia se dedica a transportar indocumentados a Estados Unidos, sustrajeron a Isabella de la casa de María de Lourdes. La bebé, hija de María Fernanda y del violentador vicario tenía solo una semana de nacida.

Este caso fue expuesto por Urbano Noticias en tres ocasiones. La primera el 15 de marzo de 2022, cuando María Fernanda dio una conferencia en la asta bandera del Zócalo de Puebla informando que denunció la sustracción de Isabella en el Ministerio Público de Tepeaca; la segunda fue el 11 de mayo cuando varias madres víctimas de violencia vicaria marcharon por las calles de Puebla.

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La tercera ocasión fue el pasado 10 de octubre, tras salir del albergue de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas (CEEAVI) en dónde vivió de mediados de mayo a finales de agosto, luego de recibir amenazas de muerte por parte de Juan “N” tras hacer público su caso en la marcha referida.

La última denuncia mediática se realizó en este medio de comunicación luego que María de Lourdes, quien cobijó a su hija y a sus nietos nuevamente en su casa, recibió mensajes de WhatsApp en donde Juan “N” le enviaba fotografías de él posando con un arma de fuego. Una de esas imágenes fue publicada en Urbano Noticias en la fecha referida.

En propiedad de este medio existen nuevas fotos y mensajes de texto que demuestran que María de Lourdes y María Fernanda son nuevamente amenazadas de muerte y ahora Juan “N” abiertamente expresa su consentimiento de publicar las fotografías “para que me hagan más famoso”.

Por seguridad de la denunciante y de la que esto escribe se decidió archivar este material y que sea exclusivamente María Fernanda la que lo entregue a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, instancia que hasta el momento no ha presentado a declarar a Juan “N”.

“Él está viviendo en otra ciudad diferente a Tepeca. Si sé dónde está, pero por seguridad no lo menciono(…) Sabiendo el miedo que tengo, que he estado en el albergue, que he tenido medidas de protección tras la anterior amenaza y todo lo que me pasa, en la Fiscalía me dieron un oficio para que yo lo lleve al domicilio en el que está viviendo mi agresor. Quieren que yo misma le notifique que debe presentarse a declarar. Es una locura”, contó Marifer vía telefónica.

La huida de su ciudad natal

La noche del 22 de diciembre, Marifer, Gustavo y Esmeralda, pasaron la noche en un motel de Tepeaca. La mañana siguiente partieron a Puebla para pasar la Navidad en casa de una amiga que conoció en el CEEAVI.

Tras pasar juntas las Navidad con sus hijos, la amiga de María Fernanda consiguió un cuarto con baño para que junto con sus hijos inicie una nueva vida en Puebla lejos de María de Lourdes, quien ha intentado ayudarla pero no pueden comprender el vaivén emocional al que se enfrenta una víctima de violencia vicaria.

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“Además de las amenazas, el motivo por el que me corrió mi madre de la casa es porque recibo mensajes de Juan “N” en Facebook y piensa que voy a regresar con él, pero no estoy loca. Viví un infierno y lo único que quiero es recuperar a mi niña, no la pude amamantar. Ya tiene 10 meses y no sé cómo está, quien la cuida. Comprendo a mi madre y la disculpo y ahora debo empezar de cero otra vez con mis hijos”, contó.

Inicia una nueva vida con apoyo del Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria

El pasado 26 de diciembre, Marifer se vio sola con sus hijos en un cuarto por el que pagó una mensualidad de 800 pesos, el único recurso que le quedaba. Ese día pidió nuevamente el auxilio del Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria (FNCVV) a través de Luz del Carmen Arredondo, la representante en Puebla.

La abogada y activista en 24 horas realizó una colecta, que convocó en redes sociales y con sus amistades cercanas, para obtener en donación una cama y un colchón, despensa, ropa y zapatos, además de juguetes.

Para el 28 de diciembre, Luz del Carmen consiguió dos ollas, una tamalera y una para atole para que Marifer haga y venda tamales, como lo hacía en Tepeaca, para que pueda ser autosustentable y comenzar de nuevo, al tiempo de estar en la capital y poder exigir a la FGE que agilice su caso.

“El 26 de diciembre mi amiga que conocí en el albergue me dijo vente hoy nuevamente a dormir para que no pasen frio en la noche y mañana pide ayuda. Tenía mi mente en blanco y en ratos me pasa eso que le dicen estrés postraumático, del llanto paso a la risa y así. Bueno pues le marqué a la señorita Luz y ella se convirtió en mi ángel”, contó.

Al respecto la representante en Puebla del FNCVV, refirió que este es el segundo desplazamiento de una madre víctima de violencia vicaria que auxilian en el frente, además de señalar que a mediados de enero del 2023 buscarán un acercamiento con el titular de la FGE, Gilberto Higuera Bernal, para analizar las denuncias estancadas de sustracción de menores con agravante de violencia vicaria como es el caso de María Fernanda.

Añadió que la colecta en favor de Marifer y sus hijos continúa, y que aun les falta conseguir un par de anafres para la venta de tamales y atole para que pueda tener una fuente de ingresos estable que le permita pagar su renta y alimentos.

Por: Mónica Franco

Foto: Especial

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