Advierte relación entre las ejecuciones extrajudiciales y la criminalización de las personas de Coyomeapan

Más de 500 personas acudieron a la ciudad de Tehuacán para resguardar el hospital en espera de la salida de los lesionados.

La tarde de este jueves, fueron dados de alta dos integrantes de la «Unidad por Coyomeapan» quienes fueron lesionados en la emboscada de Zoquitlán, el pasado 9 de mayo.

Marco Antonio Solis y Lauro Gil, recibieron heridas de bala en diferentes partes del cuerpo, por lo que estuvieron más de 20 días hospitalizados en el Sanatorio Sagrado Corazón de Tehuacán, ubicado en la Avenida Reforma Sur de la ciudad.



Esta situación causó una movilización de la población de Coyomeapan, pues desde la mañana, más de 500 personas acudieron a la ciudad de Tehuacán para resguardar el hospital en espera de la salida de los lesionados.

Con palos en mano, por varios minutos cerraron la avenida de Reforma a la altura de la 3 Oriente en espera de la salida de sus compañeros, debido a que trascendió, existía temor de que fueran detenidos ya que supuestamente cuentan con una orden de aprehensión, sin embargo no quisieron mencionar nada al respecto.

No obstante, una comisión de «La Unidad por Coyomeapan», mencionó que solamente se encontraban ahí para resguardar la salida y que una vez que los lesionados salieran se trasladarían en caravana y con apoyo de la Fiscalía General del Estado, FGE, hasta Coyomeapan.

Minutos después, ambos hombres salieron con apoyo del personal del hospital y sus familiares, sin mencionar nada al respecto abordaron una unidad e inició así su traslado.

Los pobladores aplaudieron la mejora de salud de las víctimas, así mismo, volvieron a reprobar los hechos ocurridos el pasado 9 de mayo, exigiendo justicia.

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