Hubo gran asistencia por parte de la comunidad universitaria en La Lonja Xavier Cacho, S.J., según el rector
Con motivo del Día de la Comunidad, la «Misa Coldplay» se llevó a cabo este miércoles una misa en la Universidad Iberoamericana (UIA), la cual incluyó canciones del grupo británico, lo que provocó críticas de la Comisión Diocesana para la Pastoral Litúrgica.

El rector de la Ibero-Puebla, Fernando Fernández Font, consideró que la misa tuvo el impacto esperado, pues tuvo gran asistencia por parte de la comunidad universitaria en La Lonja Xavier Cacho, S.J.

La institución de corte jesuita incluyó temas musicales interpretados por la banda liderada por Chris Martin y, a decir Fernández Font, reflejó la creatividad e innovación de esta casa de estudios.

«Vean cuántos (jóvenes) van a los templos, cuántos van a misa; entonces, o hacemos algo o las iglesias se quedarán bajas como sucedió en Europa», consideró el rector, quien también resaltó que esta es la primera vez que ve a muchos jóvenes en misa.

Además, subrayó que este tipo de música día no «tergiversó, ni transgredió» la liturgia, por lo cual no se descarta que el próximo año se emplee una estrategia similar para atraer a más jóvenes a estas celebraciones; «este grupo (Coldplay) es algo que les gusta (a los jóvenes) y sus canciones tienen sentido cristiano, aunque no lo digan, en sus párrafos se lee el perdón, la esperanza, la creación, el llanto», dijo.

En contraparte, Jacinto Gerardo Cruz Rojas, presidente de la Comisión Diocesana para la Pastoral Litúrgica, recordó que la Eucaristía es el tesoro más grande de la Iglesia desde sus inicios, por lo que cuando este valor y sentido se pierde, se corre el riesgo de volverla sólo un acto devocional o simplemente una reunión de buena voluntad.

Señaló que si bien el Concilio Vaticano II promueve la participación activa en las acciones litúrgicas a través de la música y el canto, existen normas que sirven para dar marco a esta visión:

“Se debe evitar que, bajo el pretexto de experimento, se realicen en las iglesias cosas que desdigan de la santidad del lugar, la dignidad de la acción litúrgica y la piedad de los fieles”.