Entre 2019 y 2020 el número de víctimas de trata creció cuatro veces.
Los y las candidatas que participen en el proceso electoral de 2021 no deben tener señalamientos por vínculos con redes de trata de personas y, entre sus propuestas, deben contemplar el cese del mensaje social de impunidad sobre este delito en Tlaxcala, demandó la activista Marisol Flores del Centro “Fray Julián Garcés” Derechos Humanos y Desarrollo Local A.C.
Durante el foro de Análisis de Contexto que organiza el Colectivo Mujer y Utopía, la representante del Centro Fray Julián Garcés, Marisol Flores, sostuvo que, a más de ocho años del reconocimiento institucional del problema en el estado, el acceso de las mujeres a la justicia no existe y la eliminación de la impunidad en torno a la trata de personas no avanza.
Lo anterior se demuestra con el comparativo entre las 49 mujeres víctimas del delito rescatadas entre 2017 y 2020 y las cuatro sentencias declaradas entre 2011 y 2014 contra tratantes, además de la liberación de un victimario en junio de 2020 cuando el Tribunal Superior de Justicia decretó el auto de libertad.
De acuerdo con el SESNSP, el año pasado el número de mujeres víctimas de trata de personas fue cuatro veces más alto que en 2019 al pasar de 3 a 15 mujeres víctimas lo que, para el Centro Fray Julián Garcés, muestra que prevalece la impunidad y las acciones desarticuladas sin la vigilancia del Consejo Estatal contra la Trata que, desde su creación en 2017, no ha presentado los informes mensuales sobre el avance y combate contra el delito.
Marisol Flores señaló que la pandemia visibilizó las nuevas formas de explotación de mujeres y niñas y la opacidad de las instituciones para investigar los negocios donde se localizaron servicio sexuales.
“A la fecha no sabemos si las autoridades iniciaron investigaciones contra los dueños de esos lugares, si la Unidad de Inteligencia Financiera y el gobierno del estado -después de firmar el año pasado un convenio de colaboración- investigan a los negocios en Tlaxcala, no tenemos un informe de los operativos de cierre de estos establecimiento, y el tratamiento de las mujeres localizadas siguen refiriéndose a ellas no como víctimas de delitos”.
En el contexto de las elecciones en Tlaxcala, la activista señaló que los candidatos deben comprometerse a generar acuerdos entre los ayuntamientos e instituciones estatales para que las mujeres victimas de violencia reciban atención, protección y acceso a la justicia.
Además, que se construyan refugios especializados que protejan y garanticen el derecho a denunciar sin que recaiga en ellas la investigación, así como dejar las campañas públicas de promoción y centrarse en el trabajo a mediano y largo plazo.
“La trata de mujeres y las formas de violencia extrema que se ejerce en el estado se unen al sistema patriarcal, capitalista y neoliberal… los casos de impunidad en Tlaxcala mantienen el mensaje social sobre la permisibilidad, el poco riesgo y la tolerancia de una problemática que va más allá de Tenancingo”, además destacó que la sociedad “sigue ejerciendo una masculinidad machista, consumidora y explotadora de mujeres”.