Dichas demandas son respaldadas por las asociaciones civiles: Católicas por el Derecho a Decidir, Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia , Justicia Pro Persona y Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio.
A dos años del asesinato de la médica de 26 años de edad, Zyanya Estefanía Figueroa Becerril, asociaciones civiles exigieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla garantizar que la investigación se realice con perspectiva de género y debida diligencia, así como corregir el dictamen de necropsia.
También solicitan que a la brevedad se realicen los dictámenes correspondientes en materia de medicina forense y criminalística para el esclarecimiento de la forma en que falleció y los peritajes necesarios.
Dichas demandas son respaldadas por las asociaciones civiles: Católicas por el Derecho a Decidir, Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia (IMDHyD), Justicia Pro Persona y Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).
Destacan que a pesar de haber sido una muerte violenta, desde el momento en el que ocurrieron los hechos, se inició la investigación como un suicidio y no como un probable feminicidio, por lo que la Fiscalía incumple con su obligación de investigar con perspectiva de género.
Zyanya era médica residente en el Hospital del Niño Poblano, en la ciudad de Puebla, donde se encontraba haciendo su especialidad en pediatría, fue encontrada sin vida al interior de su departamento en Puebla, el 15 de mayo de 2018. La versión oficial es que se suicidó, pero su familia no cree que así haya ocurrido.
Entre las omisiones e irregularidades en la investigación, señalan incorrecto levantamiento de indicios y evidencias en el lugar, pues lo único que se obtuvo fue el cuerpo y la bufanda con la que supuestamente se quitó la vida; seis meses después, se hizo una búsqueda exhaustiva de mayores indicios de la que se desconoce los resultados.
Lesiones, no son las de un ahorcamiento
Sobre el dictamen de necropsia señalan que las lesiones identificadas en el cuello presentan características particulares que tampoco fueron descritas claramente y que no obedece a un ahorcamiento suicida, por lo que desvirtúa esa hipótesis y sostiene la de un probable feminicidio.
Además destacan que la víctima presentó diversas lesiones que podrían clasificarse de infamantes y degradantes; sin embargo, hasta la fecha persisten inconsistencias en la descripción de los signos que presenta el cuerpo de Zyanya.
Mientras que, dicen, el dictamen en criminalística es “deficiente e incompleto”, pues es un informe de procesamiento de indicios, que no aporta mayores elementos para comprender la forma en la que ocurrieron los hechos, de igual forma, la mecánica de lesiones presentada por la Fiscalía no es compatible con el número y ubicación con las que presenta el cuerpo de Zyanya.
Tampoco se realizaron peritajes psicosociales, de antropología social, ni de análisis de contexto en la investigación para identificar la existencia de violencia previa contra Zyanya, que pudiera tener relación con su muerte.