«Hasta el momento, podemos afirmar que la mayoría, quizá todos los casos detectados en las escuelas, son contagios ocurridos fuera de la escuela”, acotó.

Durante la primera semana de la aplicación de la estrategia Lolli en tres municipios de Tabasco, en al menos una de cada 10 aulas (14%) que regresaron a clases presenciales se encontraron casos de alumnos o maestros infectados con el virus SARS-CoV-2 que se fueron a cuarentena para evitar algún contagio.

Como resultado de la estrategia diseñada en el Instituto de Virología de la Universidad de Colonia, Alemania, que muestrea a los estudiantes y docentes interviniendo de forma temprana para aislar las aulas y casos positivos, para la segunda semana tan sólo 6% de los salones resultaron positivos.

Más de 95% de estos casos han sido asintomáticos. Es importante señalar que, al ser asintomáticos, estos niños y maestros pasaron todos los filtros sanitarios, tanto de casa como de la escuela establecidos para el control epidemiológico incluyendo cuestionario de síntomas y temperatura. Es decir, sin la estrategia Lolli no hubiera sido posible detectarlos y aislarlos.

Si consideramos que con la variante Delta una persona infectada puede contagiar a un promedio de entre 4 a 9 personas, si estos casos no se hubieran detectado y aislado hubiésemos tenido entre 908 y 2 mil 43 nuevos contagios tan sólo por estas dos primeras semanas de clases”, estimó Gibran Horemheb Rubio Quintanares, posdoctorante en el Instituto de Virología de la Universidad de Colonia.

Hasta el momento, podemos afirmar que la mayoría, quizá todos los casos detectados en las escuelas, son contagios ocurridos fuera de la escuela”, acotó.

En entrevista con Excélsior, el mexicano, médico y doctor en ciencias, explicó que, aunque parecieran muchas aulas positivas, en realidad se tiene un bajo porcentaje de positividad.

Lo anterior, debido a que, durante la primera semana de clases se analizó a un total de 13 mil 116 personas, entre alumnos y maestros, encontrando 1.2% de personas con infección por SARS-CoV-2, cifra que se vio reducida a la mitad para la segunda semana con tan sólo 0.6% de casos detectados de un total de 12 mil 12 personas analizadas.

Si la reducción de casos se debe a la estrategia Lolli podría decir que, aunque todas las medidas contribuyen, la estrategia sí está marcando la diferencia gracias a la detección oportuna, incluso de asintomáticos y la intervención temprana. Al detectar un aula positiva, inmediatamente se aísla el grupo 5 días y se hace la búsqueda de casos individuales. Las personas negativas de un aula positiva regresan a los 5 días a la escuela, no sin antes volverse a tomar una muestra para asegurar que continúan negativos y los positivos lo hacen después de su cuarentena obligada de 10 a 14 días, como cualquier caso detectado en la población”, detalló.

Según Rubio Quintanares, en el caso mexicano se ha venido a confirmar la experiencia que se tiene de Alemania y otros lugares del mundo respecto de que las escuelas son lugares “bastante seguros”.

La nota completa se puede leer AQUÍ.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *