Investigadores en China encontraron que los adictos al celular tenían puntuaciones bajas en fluidez, flexibilidad y originalidad, entre otras limitaciones
El abuso del teléfono celular puede afectar severamente la creatividad; esta aseveración que en un primer momento podría parecer lógica surge de una investigación en China que salió a la luz en la publicación Social Cognitive and Affective Neuroscience, que utilizó neuroimágenes y tareas específicas para evaluar y comparar las respuestas creativas de las personas con y sin adicción al celular.
Los participantes fueron estudiantes universitarios que tenían entre 18 y 25 años de edad. Para medir su nivel de adicción, los investigadores emplearon el Smartphone Addiction Scale (SAS). Luego fueron divididos en dos grupos: el grupo experimental con las 24 personas que obtuvieron los puntajes más altos en el test y el grupo control con la misma cantidad de personas que obtuvieron los puntajes más bajos. Todos estaban libres de medicación que pudiera afectar su sistema nervioso y no tenían otras conductas adictivas.
Para evaluar la creatividad, los investigadores usaron las Tareas de usos alternativos, una prueba desarrollada por J.P Guilford en 1967 que consiste en nombrar durante 30 segundos en todos los usos posibles de un objeto. Cada participante realizó la prueba y luego se les pidió que memorizaran esa lista y que la repitieran.
La segunda fase utilizó neuroimágenes para revelar lo que estaba haciendo el cerebro mientras los participantes respondían a la tarea de usos alternativos. La mitad de los participantes ya habían visto algunos de los objetos en la primera fase. Por lo tanto, ya se les había pedido que recordaran los usos más comunes del objeto.
Aquellos participantes que habían pensado creativamente sobre objetos que habían visto previamente en el experimento estaban en lo que el equipo de investigación llamó la “condición restringida”. Aquellos a quienes se les pidió que nombraran en todos los usos de los objetos nuevos estaban en la “condición sin restricciones”. Tanto el grupo experimental como el de control tenían participantes con restricciones y sin restricciones. El propósito de estas dos condiciones era aumentar la dificultad de la Tarea de Usos Alternativos; a los participantes que habían estado expuestos previamente les resultaría más difícil nombrar otros usos alternativos.
Al analizar los resultados, los investigadores encontraron que los participantes con adicción al celular tenían puntuaciones bajas en fluidez, flexibilidad y originalidad; además, tenían una activación reducida en el área cortica y en la conectividad funcional en la corteza prefrontal y la corteza temporal, lo que hace que sea más difícil superar las limitaciones semánticas y establecer asociaciones originales durante la generación de ideas creativas.
Los autores hallaron como limitaciones importantes que los «adictos» no diferenciaron entre diferentes tipos de adicción al celular. Algunos podían estar adictos a los videojuegos en el celular, mientras que otros tenían adicción a las redes sociales. Esto podría tener consecuencias diferentes.
La investigación, que exploró solo un componente de la creatividad, ofreció valiosa información acerca del impacto de la adicción al celular sobre la capacidad cognitiva.