Es otra forma de estimular el sistema inmunológico de las y los pacientes hospitalizados por esta enfermedad.


En el Hospital General de Zona (HGZ) Nº 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tlaxcala, todos los días, en la sección de hospitalización dónde son atendidos las y los pacientes con COVID-19, el personal de diversas áreas y categorías, detrás del cristal de los ventanales, les envían mensajes de ánimo en pancartas a color, les echan porras y les ponen música.

La psicóloga clínica del hospital, Perla Rojas Montalvo, explicó que cuando una persona está hospitalizada, siempre hay temores e incertidumbre, y más frente a este virus, del que se dicen muchas cosas y que la gente no alcanza a comprender del todo.

“Buscamos estimular el sistema inmunológico de las y los pacientes, inyectándoles ánimo y alegría, energía positiva, a través de los mensajes escritos en cartulinas que ellos pueden leer a través de sus ventanales, así como escuchar nuestras porras y la música que elegimos también para ellos”, explicó.

Refirió que es gratificante ver como sus miradas cambian, se refleja mayor esperanza y su semblante adquiere una nueva tonalidad al verlos y escucharlos llegar todos los días, y ver a través de sus ventanas los mensajes positivos, “que ellos sepan que son importantes para nosotros y que no están solos”.

La especialista del IMSS en Tlaxcala señaló que esto se hace particularmente con las y los pacientes con COVID-19, dado que sus familiares no pueden estar con ellos en el hospital, junto a su cama, como sí ocurre con el resto de los pacientes hospitalizados a causa de otras enfermedades.

Por ello, hacia esa parte altamente sensible, van dirigidos también los mensajes de las cartulinas y la música, es una forma de hacerles saber que sus familias están al pendiente de ellos y que los esperan; “es pedirles que se reanimen, no decaigan y retomen sus impulsos para estar bien lo más pronto posible”.

Esta motivación también va dirigida al personal de los equipos COVID, porque independientemente de que se trate de su trabajo, deben permanecer encerrados y con los equipos de protección que deben usar por muchas horas, para brindar una buena y puntual atención sin exponerse.

A través del oído, ellos también escuchan que son parte de un equipo y que su labor es muy importante. También les apoyamos por medio de talleres para canalizar la sintomatología de ansiedad, estrés, y miedo, en grupos pequeños y con sana distancia, explicó, Perla Rojas Montalvo.

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