En total, en cuatro de las 15 entidades donde se llevará a cabo el relevo de gobierno estatal, Colima, Michoacán, San Luis Potosí y Zacatecas.
Tras las elecciones celebradas el pasado 6 de junio, durante el cambio de poderes en ocho de 15 entidades, los nuevos gobernadores han coincidido en denunciar que han heredado adeudos, además de que las arcas públicas locales están vacías.
Hasta ayer, con la llegada de los nuevos gobiernos en Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Nayarit, San Luis Potosí (SLP), Sonora, Tlaxcala y Zacatecas, el común denominador ha sido el señalamiento de que se reciben estados con números rojos.
María Eugenia Campos, mejor conocida como Maru Campos, al asumir como primera gobernadora electa en Chihuahua subrayó que comenzó a gobernar con finanzas comprometidas y una deuda de más de 800 millones de pesos; apenas ayer, Ricardo Gallardo aseveró que el PRIAN dejó en esa entidad “una herencia maldita de pobreza y desigualdad”, en tanto que en Zacatecas, David Monreal, resaltó que “la irresponsabilidad de gobiernos pasados dejaron un quebranto financiero”.
Este fin de semana, Ricardo Olivares, secretario de finanzas del gobierno de Zacatecas, reconoció que la administración que encabeza Monreal no puede cubrir el pago de la nómina de maestros de la entidad, ni para continuar con el mantenimiento del sistema de pensiones.
«Le digo a los maestros: en Zacatecas no hay dinero, si hubiera dinero ya les habríamos pagado, no tengan ninguna duda».
“La delicada situación que enfrenta el magisterio actualmente se debe a la omisión que el gobierno del estado que entre 2014 y 2015 no introdujo a la planta docente como beneficiaria del Fondo de la Nómina Educativa, la cual permitió a la Federación absorber en su mayoría las nóminas educativas estatales”, explicó.
En ese sentido, David Monreal afirmó que se requieren dos mil millones de pesos para cubrir los sueldos a profesores; sin embargo, destacó que su prioridad es primero pagara las personas pensionadas y jubiladas, luego a la clase trabajadora más “modesta” y al final a los docentes.
“Le digo a los maestros: en Zacatecas no hay dinero, si hubiera dinero ya les habríamos pagado, no tengan ninguna duda”, aclaró David Monreal, gobernador entrante de Zacatecas.
En total, en cuatro de las 15 entidades donde se llevará a cabo el relevo de gobierno estatal, Colima, Michoacán, San Luis Potosí y Zacatecas, han subrayado que la anterior administración dejó en quiebra a esos estados, lo que se ha traducido en falta de pagos a diferentes sectores como el de la Salud, pero principalmente en adeudo de salarios y otras prestaciones al magisterio.
«Hasta ahorita nosotros contabilizamos que son más de mil millones de pesos que se le adeuda al magisterio mexicano, pero lo más complicado es que no han informado qué es lo que va a pasar con las quincenas que sigue», dijo Gamaliel Guzmán Cruz, secretario general de la sección XVIII de CNTE en Michoacán.
Colima, el pasado 9 de septiembre miembros de la sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) protestaron afuera de Casa de Gobierno y reclamaron al gobernador José Ignacio Peralta Sánchez el retraso en el pago de sus quincenas y los servicios médicos. Dicha entidad trae impago y aumento de deuda.
Un estudio del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados (CEFP), Colima aumentó 32.6 por ciento en sus obligaciones financieras en el último sexenio, lo que representa el mayor porcentaje entre los 15 estados que tendrán relevo en la gubernatura en 2021.
En el mismo caso se encuentra el personal docente en Michoacán, que sigue exigiendo los pagos retrasados de sus sueldos durante la administración del mandatario saliente, Silvano Aureoles, por lo que en días pasados se informó de un préstamo comprometido de unos tres mil 600 millones de pesos.
En tanto, la administración que encabezará Samuel García en Nuevo León, heredará la segunda deuda pública más alta de todo el país, además de crisis económica como la del transporte, salud, seguridad, entre otras.
En otras entidades en las que no ha habido cambio de administración estatal, como Guerrero, hubo impago a los docentes y una petición de apoyo a la Federación para cubrir dicho adeudo que apoyó el Ejecutivo federal; mientras que en Sinaloa, se dio una negociación en las oficinas de la Secretaría de Gobernación entre el gobernador saliente, Quirino Ordaz y el entrante, Rubén Rocha. En entidades como Baja California, Nuevo León y Querétaro, aún no hay un pronunciamiento sobre el tema.
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