Inició en la corte de Nueva York lo que se considera el histórico juicio contra Donald Trump, expresidente de Estados Unidos.
El magnate de 77 años de edad está acusado de 34 delitos relacionados con fraude, política, sexo y dinero.
La táctica es sencilla, incluso básica, pero extremadamente eficaz: ganar tiempo. A fuerza de apelaciones, con argumentos a veces sorprendentes, Donald Trump se propone evitar la mayoría de sus juicios penales antes de las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El candidato republicano, que se enfrentará en las urnas al presidente demócrata Joe Biden en las elecciones del 5 de noviembre, hace cuanto puede por retrasar los juicios que tiene pendientes, cuatro de ellos en el ámbito penal.
El juicio podría durar seis semanas y, de ser declarado culpable, el expresidente y actual candidato republicano a la presidencia podría ir a prisión durante cuatro años.
Incluso cuando no gana el caso, el tiempo que se tarda en dirimir cada una de sus apelaciones acerca al expresidente (2017-2021) a la meta.
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