*Las fracturas y fisuras se volvieron recurrentes en cada uno de los sismos que han afectado la zona pese a reparaciones.

Los edificios históricos más dañados por los recientes sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 están localizados en las vertientes del volcán Popocatépetl, los cuales deben ser restaurados con materiales y sistemas constructivos virreinales, porque los materiales contemporáneos no se mueven de manera uniforme al resto de la construcción original durante los temblores, y podrían generarse daños mayores en otro movimientos sísmico. 

Alejandra González Leyva, doctora en Historia del Arte por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló lo anterior en su ponencia: “Entre el recuerdo de los terremotos del pasado, las ruinas del presente y la posibilidad de reparar los daños. Historia, etapas constructivas, materiales originales y contemporáneos de los conjuntos conventuales de las vertientes del Popocatépetl”,  durante el Coloquio de contingencia: Los daños del terremoto que se realiza en el Museo Amparo.

En su exposición, señaló que tras una revisión de los expedientes de las intervenciones realizadas a templos de comunidades circundantes al Popocatépetl –donde se encuentran las fundaciones más antiguas de los Franciscanos en Huejotzingo, 152; Dominicos en Oaxtepec, 1528; y Agustinos en Ocuituco, 1533– detectó que las reparaciones que se realizaron durante el siglo XX “han sido en las mismas fracturas y fisuras, las cuales se volvieron recurrentes en cada uno de los sismos que han afectado la zona”.

Además que los materiales que se han usado en reconstrucciones: morteros de cemento, cal y arena, con aditivo expansor no ferroso y/ o de base metálica, no han servido para hacer las reparaciones correctas, pues las fisuras que fueron reparadas se volvieron abrir, lo que –consideró—significa “que materiales contemporáneos no se mueven de manera homogénea durante los temblores por su distinta composición química y densidad”.

Sugieren emplear materiales y sistemas constructivos virreinales

Por ello, propuso que la restauración de los templos aledaños al Popocatépetl se realice utilizando los materiales y sistemas constructivos virreinales, para ello, dijo, hay que analizar químicamente los ingredientes originales y utilizarlos en la cantidad y proporción que los constructores novohispanos.

Al mismo tiempo, explicó, es primordial la realización de una investigación histórica que fundamente los procesos constructivos y las cubiertas iniciales –que fueron de crucería o mampostería, como la del templo de Ocuituco– para realizar materiales semejantes a los usados en su construcción y que sean más resistentes a los terremotos, pues subrayó que debe considerarse que las estructuras de los templos nos fueron construidas para resistir pesos excesivos como las del concreto armado.

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