Los trabajadores afectados piden la intervención de la Segob para esclarecer sus despidos injustificados y amenazas.

A casi tres meses de haber asumido el cargo de presidente municipal interino de Ixtenco, Giovanni Aguilar Solís, acumuló un total de 24 demandas laborales por despidos injustificados del personal de diferentes áreas del ayuntamiento, a quienes bajo amenazas obligó a dejar sus puestos.

Mediante oficio, los ahora ex trabajadores del municipio, solicitaron la intervención de los integrantes del Congreso del Estado, así como del titular de la Secretaría de Gobierno, Aarón Pérez Carro, y de la Segob Federal, Alfonso Navarrete Prida, para hacer justicia ante la violación de sus derechos laborales.

En el oficio, los afectados explicaron que tras la suspensión de 180 días que dictó el Congreso local al presidente municipal de Ixtenco, Miguel Ángel Caballero Yonca, se designó a Giovanni Aguilar como alcalde interino, y desde el 18 de abril comenzó a hostigar, intimidar y acosar a los trabajadores del ayuntamiento en contubernio con el Secretario del ayuntamiento,  Daniel Ortiz Larios.

“Constantemente fuimos acosados por el personal identificado con el Primer Regidor y el Secretario, nos tomaban fotografías, nos grababan, nos insultaban, nos amenazaban, y nos pusieron horarios extremos; ante el temor fundado de ser despedidos solicitamos la intervención del gobernador y de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, sin embargo ante la nula intervención de las autoridades, a través de engaños y de manera arbitraria, injustificada e ilegales se registraron”, explicaron.

Los ex empleados del municipio, dieron a conocer que del 18 de abril a la fecha, Giovanni Aguilar Solís ha realizado un total de 52 despidos injustificados de los cuales 23 personas han sido obligadas a firmar su renuncia bajo la advertencia de que al no hacerlo los sacarían a golpes de la presidencia, por lo que firmaron el documento pero no fueron liquidados conforme a la ley.

Un grupo de 24 trabajadores se negaron a firmar a pesar de las amenazas, por lo que se decidieron a presentar la denuncia laboral correspondiente, y están a la espera de la determinación de la autoridad para poder acceder a la justicia ante el despido injustificado lo que sin duda generará un daño patrimonial al municipio.

De esta manera, el regidor en funciones de presidente, acumuló en menos de tres meses 24 demandas laborales, es decir casi ocho querellas por mes contados a partir del 18 de abril cuando asumió el cargo.

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