En una histórica jornada electoral, México ha elegido a su primera presidenta. Tuvimos una jornada electoral muy interesante en la que, por primera vez en la historia de nuestro país, una mujer nos gobernará. Esto es algo histórico porque, si bien ha habido participación de mujeres en las candidaturas a la presidencia en tiempos anteriores, en esta ocasión se da el triunfo con una alta participación de la sociedad, destacaron especialistas de UPAEP.

Las elecciones 2024 han sido un hito histórico para México, con una alta participación ciudadana y la elección de la primera mujer presidenta. Sin embargo, los desafíos son considerables, desde la funcionalidad del Legislativo hasta la estabilidad económica y la implementación de políticas inclusivas. La ciudadanía y las instituciones deberán seguir comprometidas para asegurar que este cambio histórico traiga consigo un verdadero progreso para todos los mexicanos, señaló Claudia Ramón Pérez, profesora de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la UPAEP.

La participación de la ciudadanía no se limitó solo a las urnas, sino también como miembros de las mesas directivas de casilla. Ramón Pérez resaltó que, aunque algunas casillas tardaron en abrir debido a la ausencia de los ciudadanos capacitados para cuidarlas, la buena voluntad de otros ciudadanos permitió que las casillas funcionaran sin mayores contratiempos.

Claudia Ramón también reflexionó sobre los desafíos que enfrentará la nueva presidenta, especialmente en relación a políticas de género y la economía. «El hecho de que una mujer llegue a la presidencia plantea la pregunta de si marcará la diferencia con políticas que respondan a las necesidades de las mujeres, como el regreso de las estancias infantiles o incentivos para las investigadoras”.

En cuanto a la economía, mencionó la reciente depreciación del peso como un indicador de incertidumbre entre los inversionistas y la comunidad internacional. «Esto representa un reto tanto para el gobierno actual como para el entrante, que deberán generar confianza y estabilidad”.

Ramón Pérez subrayó la importancia de que el nuevo gobierno gobierne para todos, no solo para quienes votaron por él. «El bien común no atiende solo a una parte, es bien para todos. El reto será implementar políticas que realmente beneficien a toda la comunidad”.

Valente Tallabs González, Director de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la UPAEP, hizo hincapié en la persistente violencia política que ha marcado el proceso desde el principio. «No podríamos decir que son unas elecciones ejemplares porque está presente este siniestro fantasma de la violencia política electoral», señaló.

Tallabs González, abordó el reto de enfrentar la violencia y el crimen organizado que el nuevo gobierno deberá enfrentar. Subrayó que, aunque el día de las elecciones transcurrió relativamente sin mayores incidentes, la violencia previa no puede ser minimizada y requiere una reflexión seria para prevenir futuros actos similares.

En términos de análisis político, Tallabs González resaltó la sorpresa de los resultados legislativos, con Morena y sus aliados logrando una mayoría significativa, incluso en el Senado. Este desequilibrio ha generado preocupación tanto en los mercados como entre los analistas. «Creo que ahí es donde viene justamente lo que comentaba la Dra. Claudia Ramón, estas especulaciones financieras de parte de los mercados», explicó.

Asimismo, destacó que la percepción de seguridad y estabilidad económica durante el gobierno de López Obrador ha jugado un papel crucial en los resultados. «El nivel de confianza del consumidor también es mayor, lo cual quiere decir que la gente, aunque es subjetivo, pero en su percepción, cree que la economía está mejor que antes y que va a estar mejor», agregó.

Tanto Claudia Ramón como Valente Tallabs coincidieron en que la reconfiguración del mapa político y los desafíos del nuevo gobierno serán cruciales para el futuro del país. Ramón Pérez planteó interrogantes sobre las políticas que implementará la nueva presidenta, especialmente en cuanto a género y bienestar común. Por su parte, Tallabs González enfatizó la necesidad de una estrategia clara para enfrentar la violencia y consolidar una oposición responsable.

En este escenario, el papel de los partidos tradicionales como el PAN, PRI y PRD será reevaluado, mientras que Movimiento Ciudadano se consolida como la tercera fuerza política. Los próximos meses serán determinantes para observar cómo se desarrollarán estas dinámicas y cómo se ajustarán las fuerzas políticas a la nueva realidad del país.

Juan Pablo Aranda Vargas, Director del Departamento de Formación Humanista de la UPAEP, señaló que hay que reflexionar sobre la relevancia de la educación cívica y la necesidad de una reconciliación nacional para fortalecer la democracia en México.

Aranda Vargas destacó el que la ciudadanía saliera a votar, incluso en este ambiente de violencia que produce miedo y desincentivara la participación. Sin embargo, enfatizó que la democracia es, antes que nada, una forma de vida en sociedad, más allá de las instituciones y los votos. «La democracia es una forma de ser de la sociedad, y en ese sentido, una de las grandes tareas es la reconciliación nacional», afirmó.

Para Juan Pablo Aranda, el antagonismo social que ha prevalecido en el país es un obstáculo significativo. «Llevamos muchísimo tiempo en el cual el país se mueve en blanco y negros, donde el otro es visto como el enemigo», dijo, subrayando la necesidad de superar esta polarización para lograr una democracia funcional. Criticó la actitud de los partidos políticos que se declararon ganadores antes de tiempo, lo cual considera una muestra de la falta de respeto a la lógica democrática.

En cuanto a la educación cívica, Aranda planteó que aún hay mucho por hacer. «Es una sociedad altamente mediatizada, y las redes sociales, lejos de informar, cierran el mundo del ciudadano impidiéndole pensar más allá de su propio entorno», observó. La educación cívica debe enseñar a los ciudadanos cómo vivir en democracia, más allá del acto de votar. La democracia necesita demócratas, y los demócratas se educan, afirmó, abogando por un sistema educativo que fomente una comprensión profunda de la democracia y una participación ciudadana activa y crítica.

Además, hizo hincapié en la necesidad de formar politólogos que estudien y desarrollen políticas públicas basadas en el bien común. «Nos hacen falta politólogos que sepan estudiar y analizar estos fenómenos y que puedan crear políticas públicas bien hechas», agregó.

Juan Pablo Aranda también abordó los desafíos específicos que enfrenta la próxima administración de Claudia Sheinbaum, subrayando la necesidad de cumplir la promesa de Morena de priorizar a los pobres. «Los datos no le dan la razón a López Obrador; no se evidencia una apuesta fuerte por sacar a los pobres de la pobreza», argumentó. En su opinión, es fundamental que las políticas se orienten a crear oportunidades reales para los pobres, más allá de las dádivas.

Por último, destacó la importancia de las clases medias para la estabilidad democrática. «Las clases medias le dan estabilidad al sistema; son un baluarte de los valores democráticos de moderación, tolerancia y diálogo», explicó. Criticó el ataque sistemático del gobierno actual a las clases medias, llamando a una reevaluación de esta estrategia.

Herminio Sánchez de la Barquera, profesor de la Licenciatura en Relaciones Internacionales de la UPAEP, subrayó que la celebración de elecciones no es suficiente para considerar a un país como una democracia plena. «Es importante recordar que no por celebrar elecciones vivimos en un país democrático», afirmó. Señaló que en una verdadera democracia, los partidos deben estar dispuestos a aceptar tanto victorias como derrotas. «Las derrotas no son para siempre ni las victorias son para siempre. Debemos aprender a perder y a jugar en igualdad de circunstancias», enfatizó.

El académico también se refirió a la convivencia entre mayorías y minorías, criticando la tendencia a descalificar a las minorías en lugar de gobernar con ellas. «La democracia no es el gobierno de las mayorías sobre las minorías, sino de las mayorías con las minorías», aclaró. Manifestó su escepticismo respecto a la promesa de reconciliación nacional, recordando que tanto López Obrador como Claudia Sheinbaum han hecho promesas similares sin resultados concretos.

Sánchez de la Barquera expresó su preocupación por la concentración de poder en un solo partido, advirtiendo sobre la falta de contrapesos. «Es digno de pensarse que se le haya dado todo a un mismo partido. ¿Cómo vamos a poder controlar lo que está pasando si ellos tienen todo?», cuestionó. Criticó la homologación de elecciones en México, considerándola peligrosa y perjudicial para las agendas locales. «Un país federal con elecciones homologadas es muy peligroso. Las agendas locales pierden atractivo frente a la agenda federal», sostuvo.

El académico también hizo un llamado a modernizar las leyes electorales, eliminando prácticas obsoletas como la ley seca durante las elecciones. «Es absurdo que haya una ley seca en un país del siglo 21», declaró, cuestionando la lógica detrás de esta medida.

Refiriéndose a la falta de una oposición efectiva, destacó la necesidad de una renovación profunda en los partidos políticos. «Estamos en el peor de los mundos: hemos salido de un mal gobierno, pero tenemos una pésima oposición que no ha aprendido a enfrentar el caudillismo populista», lamentó. Hizo un llamado a las universidades para fortalecer el estudio de la ciencia política y la gestión pública, promoviendo una formación integral de demócratas y técnicos capaces de desarrollar buenas políticas públicas.

Sánchez de la Barquera abordó el tema de la pobreza, expresando su escepticismo sobre el interés real de Morena en erradicarla. «El mismo López Obrador dijo que necesitaban a los pobres porque los pobres, mientras más pobres y analfabetas, votarían por Morena. No creo que tengan mucho interés en sacarlos de la pobreza», afirmó, sugiriendo que la voluntad política para hacer cambios significativos es insuficiente.

Concluyó su intervención destacando la influencia persistente del PRI en la cultura política mexicana, incluso dentro de Morena. «El peso en la cultura política mexicana del PRI está por estudiarse. Es impresionante cómo ha influido en la conformación de los partidos y en la elección de candidatos», señaló, sugiriendo que, aunque el PRI pueda desaparecer, su legado perdurará en la política mexicana.

Herminio Sánchez de la Barquera, académico de la UPAEP presentó una visión crítica sobre las elecciones de 2024, subrayando la necesidad de una verdadera reconciliación nacional, una oposición efectiva, la modernización de las leyes electorales y una educación integral en democracia y gestión pública.

Sigue la información de última hora en las redes sociales de URBANO Noticias Puebla y Tlaxcala

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *