Eduardo Ismael Hernández, profesor investigador de la UPAEP, indicó que hay zonas históricamente peligrosas en caso de sismo en la capital poblana
El riesgo sísmico en la ciudad de Puebla y zona conurbada ha crecido por la falta de atención a daños invisibles en inmuebles y un desarrollo urbano desordenado en suelos que amplifican el movimiento telúrico.
Eduardo Ismael Hernández, profesor investigador de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), indicó que hay zonas históricamente peligrosas en caso de sismo. En la capital poblana está el Centro Histórico, mientras que en la periferia se ha identificado la región sur de la capital poblana y los predios ubicados en Cuautlancingo, en los límites con el estado de Tlaxcala y la lateral de la autopista Puebla-Tlaxcala.
En todos los casos hay suelos que amplifican el movimiento sísmico, que pueden tener impactos graves en inmuebles mal construidos o dañados en anteriores sismos, pero que no se detectaron.
«Después de cada temblor, los edificios se mueven, se deforman, y experimentan daños visibles, pero hay muchos que son invisibles. Estos edificios son los que significan un riesgo para el siguiente temblor (…) El llamado es a las autoridades para que se hagan los estudios de vulnerabilidad donde hay indicios de daños, para hacer lo pertinente», apuntó.
Durante la conferencia «Medidas preventivas en caso de sismos. A 5 años del sismo de 2017 y 37 años del sismo registrado en 1985», insistió que la zona urbana de Puebla tienen «elevado peligro sísmico» en construcciones de mampostería simple (antiguas).
También detalló que un movimiento lento en un temblor causa mayor deformación a los edificios; caso contrario, cuando el movimiento es rápido, no se generan movimientos significativos en la construcción, «Hay zonas que amplifican el movimiento para estructuras como las del Centro Histórico, chaparritas y robustas, y son las de mayor riesgo», insistió.
«La ciudad sigue creciendo. En Cuautlancingo hay una zona donde se desarrollan complejos de vivienda en los límites con el estado de Tlaxcala, justo en la salida de la autopista a Tlaxcala, y antes eran zonas de labor, plana, y ahí hay terrenos lacustres que amplifican la onda sísmica. Ojalá estén construyendo respetando las normas de calidad y seguridad», acotó.