La armadora alemana Volkswagen (VW) se prepara para comenzar a producir un modelo híbrido en su planta instalada en Cuautlancingo, Puebla. Se trata del Tayron, el vehículo que sustituirá a la Tiguan en las líneas de producción.

La llegada de la SUV Tayron representa el ingreso de la VW México al mundo de la electromovilidad, aunque para lograrlo han sido necesarios una inversión millonaria y paros técnicos que permitan adecuar las líneas de ensamblaje para la manufactura del nuevo modelo, que en principio sólo se vendería en China.
En febrero pasado, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, anunció que la armadora alemana planeaba una inversión de 942 millones de pesos “para potenciar la electromovilidad en el estado”. Este proyecto para migrar hacia los autos híbridos y eléctricos ya tuvo una inversión previa de 763.5 millones de dólares en 2022.

En cuanto al paro técnico para realizar las adecuaciones necesarias para producir el nuevo modelo híbrido, éste comenzó el pasado 15 de abril y concluirá el próximo 12 de mayo, informó hace unos días Hugo Tlalpan Luna, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de Volkswagen (Sitiavw).

Actualmente, VW México produce los modelos Jetta, Taos y Tiguan. El primero es, a decir de la compañía, el auto tipo sedán más popular en México, que comercializa su versión Sportline; las otras dos son SUV, es decir, camionetas destinadas al entorno urbano: Taos en su versión Highline y la Tiguan en su versión R-Line 2.0, esta última sería reemplazada por el nuevo Tayron, un híbrido que será capaz de recorrer hasta 100 kilómetros impulsado solamente por electricidad.

Los vehículos híbridos combinan un motor de combustión interna, que funciona con gasolina convencional, y uno o más motores eléctricos que producen la energía necesaria para impulsar el vehículo, basados en la tecnología star-stop, que enciende y apaga el motor de combustión interna cuando es necesario.

En estos vehículos, cuando se conduce a baja velocidad se usa únicamente el motor eléctrico lo que reduce el uso de gasolina, lo que no sólo implica un ahorro de dinero para el automovilista, sino reduce la emisión de gases contaminantes.

Este tipo de vehículos también utilizan frenos regenerativos, que permiten recargar la batería cada que se utiliza el freno, similar al Sistema de Recuperación de Energía (ERS, por sus siglas en inglés) que utilizan los monoplazas que compiten en la Fórmula Uno.

VW México, instalado en Cuautlancingo, Puebla, cuenta con más de 20 mil empleados y en 2023 fabricó 349 mil vehículos.

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