Los recursos podrán ser utilizados para disminuir la deuda pública o crear fondos para desastres naturales
Las 32 entidades federativas de México recibieron 29 mil 556 millones de pesos de ingresos excedentes, respecto a lo que el Congreso aprobó por concepto de participaciones federales en el presupuesto de egresos de 2017.
El monto supera los 15,000 millones de pesos de recursos extra que recibieron en ese renglón un año antes.
Esos ingresos adicionales son transferidos por la federación a los estados cada mes, y son de libre disposición. No obstante, a diferencia de años anteriores, los que tuvieron en 2017 tendrán que ser destinados a la disminución de la deuda pública, a gasto de inversión y creación de fondos para desastres naturales, como lo estipula el artículo 14 de la Ley de Disciplina Financiera para las Entidades Federativas y Municipios.
Actualmente la ley tiene cambios aprobados por la Cámara de Diputados, y espera la aprobación de los senadores, para revertir algunas de esas disposiciones y abrir candados al uso de esos recursos a partir de 2018.
Cada peso excedente recibido por los estados tendrá que ayudar a amortiguar la deuda, y ya no podrá ser destinado para gasto corriente, como pago de nómina o en publicidad, refirió Kristobal Meléndez, investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
No obstante, las reglas son muy generales para transparentar el destino de estos recursos excedentes, y no se específica el proceso que deberán seguir los estados para informar sobre su uso, refirió Meléndez.
Si bien aún no se publican los resultados de los ingresos y gasto públicos de 2017 del sector público, el reparto de participaciones refleja que hubo un incremento en los ingresos petroleros y tributarios estimados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
San Luis Potosí, Baja California Sur, Veracruz, Hidalgo y Querétaro fueron los estados que se vieron más beneficiados con esta entrega, pues reportaron incrementos desde 9.7% y hasta 19.84% más a lo programado.
Campeche, entidad petrolera, fue la única entidad que reportó caídas en sus ingresos por participaciones.