Se trata de dos de los mejores jugadores de la historia en los dos clubes más importantes de España.
Lionel Messi ha conmocionado al mundo del fútbol con su decisión de querer marcharse del Barcelona. Claro está, la postura de La Pulga no ha sido tomada a la ligera, pese a que el histórico 8-2 sufrido ante el Bayern Múnich por la Champions League haya sido el gran detonante de la feroz interna desatada en el elenco blaugrana.
Al analizar la salida de La Pulga son pocos los ejemplos de una estrella de tamaña categoría yéndose por la puerta de atrás de un equipo donde es considerado ídolo y uno de los futbolistas -sino el mejor- de la historia. Y el primer caso que se asemeja es el que vivió Cristiano Ronaldo en el Real Madrid a mediados de 2018.
Haciendo un racconto y poniendo ambos casos frente a frente se pueden enumerar las siguientes similitudes y diferencias de las salidas de los dos astros del fútbol mundial.
Similitudes
Las salidas de Cristiano Ronaldo y de Lionel Messi tienen varios puntos en común. Primero que se trata de dos de los mejores jugadores de la historia en los dos clubes más importantes de España. Ambos futbolistas anunciaron sus salidas con 33 años.
El portugués luego nueve estupendas temporadas en el Real Madrid, donde cosechó 16 títulos (4 Champions League, 3 Mundiales de Clubes, 2 Ligas, 2 Copas del Rey, 2 Supercopas de España y 3 Supercopas de Europa); La Pulga tras 20 años en el Barcelona con 34 consagraciones (4 Champions League, 3 Mundiales de Clubes, 10 ligas, 6 copas del Rey, 8 supercopas de España y 3 Supercopas de Europa).
Otro de los puntos en común es que ambos tuvieron diferencias con sus respectivos presidentes y no contaron con el respaldo necesario de la cúpula dirigencial.
Cristiano Ronaldo con Florentino Pérez, a quién acusó por no haberlo respaldado en sus problemas con la Hacienda y haber propiciado su salida ante la negativa de un aumento salarial; y Lionel Messi con Josep Maria Bartomeu, quien quedó expuesto por la grave denuncia de que contrató una empresa para crear estados de opinión en las redes sociales en contra de la propia plantilla, y con La Pulga como claro destinatario. Todo esto se agravó en el último tiempo por la falta de refuerzos de jerarquía que tanto pidió el capitán y en última instancia con la contratación de Ronald Koeman para que hiciera la “limpieza” en el vestuario, apuntando como primera medida al círculo más cercano del futbolista argentino.
El último ítems es que ni Cristiano Ronaldo ni Lionel Messi tomaron la decisión de irse por tema de dinero.
Diferencias
Entre los puntos opuestos de un caso y otro no caben dudas que el más importante es el sentido de pertenencia que Lionel Messi tiene con Barcelona, y con todo el pueblo de Catalunya, que va más allá de lo futbolístico. Esto no se ve reflejado con el legado y el gran recuerdo que dejó Cristiano Ronaldo en la afición del Madrid, pero siempre relacionado a la cuestión deportiva.
La forma en que uno y otro se va del club es distinta también. Real Madrid accedió al pedido de Cristiano Ronaldo y lo vendió a la Juventus a cambio de 112 millones de euros, pese a que contaba con tres años más de contrato (hasta mediados de 2021) y una cláusula de 1.000 millones. Por su parte, el Barcelona hasta el momento no se ha manifestado y a priori no tendría en mente venderlo. Sin embargo, según informó RAC de España, el blaugrana sólo dejaría marchar a Messi por un monto cercano a los 222 millones de euros, como lo fue la venta de Neymar al PSG, la transferencia más importante de su historia. La principal diferencia aquí radica en la postura de La Pulga, quien pretende ejecutar la cláusula que firmó en 2017 y que le permite dar por terminado su vínculo al finalizar la presente temporada, pese al año que aún le queda de contrato. Por lo cual, se iría en condición de libre.
Por último, el rol del entrenador. Para Cristiano Ronaldo la presencia de Zinedine Zidane en el banco no ha sido el desencadenante, muy por el contrario. En varias oportunidades, el DT francés declaró que respaldaba los pedidos del portugués y aclaró lo tenía en cuenta en su proyecto.
El caso de Lionel Messi, todo lo opuesto. Desde que asumió, Ronald Koeman lo único que recibió el argentino fueron mensajes intimidatorios. Primero, por las palabras que le dijo al capitán sobre que “iba a ser inflexible, que llegaba con sus condiciones y que la prioridad será el equipo”, y luego con la decisión de no tener en cuenta a varios futbolistas del círculo más cercano de Lionel Messi, entre ellos su amigo Luis Suárez. Pero sobre todo por la forma en que el DT holandés lo comunicó, que fue por la vía telefónica.