¿Y el frio? “a ese lo mato con poesía”, dice José Pérez
José Pérez Márquez está sentado en el zócalo de la capital, es poeta, ha publicado tres poemarios y ahora dice que quiere escribir cuento. Estudió Sociología pero dejó la carrera por problemas de salud, eso no ha impedido que siga escribiendo.
“Empecé a hacerlo desde hace 20 años, pero las primeros poemas fueron primeros ejercicio poéticos, nunca un poema logrado, sino hasta después, hasta que vas desarrollándote como persona, como individuo, como lector y empiezas a tener conciencia de lo que escribes”, dice.
Aunque el tema era hablar sobre el frío que ha caído y aumentará en Tlaxcala, José Pérez retoma cada pregunta para desviarla a la literatura: ahora está leyendo a Carver y a Bukowski, quiere entender la forma del cuento para decir lo que vive y siente.
Los jueves se pone en la explanada del exconvento de San Francisco para vender libros viejos que trae desde la Ciudad de México en sus viajes mensuales; es un librero itinerante bajo el frío de diciembre.
“Para escribir cuento primero debes tener en tu mente la forma de la estructura, para escribir cuento debes tener la forma y ya que la tengas entonces ya puedes desarrollar cualquier cuento, a mí me llaman la atención las cosas que veo en la calle, en las personas, sus actitudes, como responden a la vida.”
¿Y el frio? “a ese lo mato con poesía”, dice José Pérez. Pepe vive en Tlaxcala, por las mañanas ayuda a su hermana atendiendo un negocio y forma parte de asambleas de un partido de izquierda, aunque no se considera militante y no sabe si ese partido merece su voto.
Es casi imposible retomar el tema del frío aunque ambos tiritemos los dientes. “Estudié sociología y por eso me llamó la atención escribir poemas de lo social y de los temas que atañen al hombre, el amor, la muerte, el odio, la venganza.”
Nos dice que también escribe ensayo, artículos y prosa que ha publicado en diversos medios impresos y digitales. En 2012 el Instituto Tlaxcalteca de la Cultura le publicó el poemario Sol y Quebranto.
Escribe en máquina de escribir, ahora está leyendo a Jorge Luis Borges, T.S. Eliot y Paul Valery. “Para mí la poesía es vida, es vitalidad, muchos se alimentan de la poesía y yo me alimento de ella para el día a día”.