Los vehículos deberán ser de pequeña capacidad
El ayuntamiento de Puebla permitirá el acceso al Centro Histórico de unidades del transporte público de pequeña capacidad, anunció el presidente municipal de Puebla, Luis Banck Serrato, tras una reunión con comerciantes del primer cuadro de la Ciudad. También, con la finalidad de reactivar el comercio, afectado por el sismo del pasado 19 de septiembre, se lanzará una prueba piloto para peatonalizar la Avenida Reforma.
Los empresarios se reunieron con el alcalde el día lunes, y propusieron que el servicio de transporte de pasajeros se cubra con unidades tipo Urban sobre las calles 9 Norte-Sur y 12 Oriente-Poniente.
Señaló que ello es un acuerdo que están analizando con Alberto Vivas Arroyo, subsecretario estatal de Movilidad y Transporte, en el que se permitiría el paso de transporte público –a partir de la siguiente semana– siempre y cuando no sean unidades pesadas en dichas vialidades para evitar afectaciones por vibraciones a los inmuebles de la zona afectados por el sismo del 19 de septiembre.
Banck Serrato indicó que el objetivo es avanzar gradualmente en la entrada de transporte público al Centro Histórico, sin embargo, dijo que aún analizan cuántas unidades podrán circular, ya que se tiene que encontrar un equilibrio, pues de pasar demasiadas unidades pequeñas, podrían causarse afectaciones similares a las que ocurrirían de permitir el paso a autobuses.
Asimismo, dijo que también se tiene previsto realizar una prueba piloto para la peatonalización de calles, pues resaltó que el Centro tiene una gran afluencia de visitantes, por lo que consideró necesario ver cómo funciona la movilidad en algunas calles si otras se cierran exclusivamente para los transeúntes.
Indicó que las calles que se podrían cerrar –«por lapsos» y no definitivamente—son las del primer cuadro de la ciudad, como la Avenida Reforma de la 11 Sur a la calle 5 de Mayo, así como algunas calles aledañas al Palacio Municipal; sin embargo evitó abundar en el proyecto.