Más de 25 mil 250 firmas se han reunido hasta el momento en protesta por lo que consideran un pésimo servicio de la línea de Autobuses Tlaxcala, Huamantla, Apizaco (ATHA), así como el incremento “arbitrario” en sus tarifas.
Al tiempo de calificarlo como un monopolio en Zacatlán y Chignahuapan, que lleva a los usuarios “a no tener más remedio que abordar sus unidades si carecen de automóvil”, Jorge González Morales, diseñador de profesión y catedrático universitario, indicó que ante esta situación presentó una solicitud ante el Secretario de Movilidad y Transporte de Puebla, Guillermo Aréchiga Santamaría, pero la respuesta fue que “han recibido un sinfín de quejas y reportes, pero la concesión es federal por lo que ellos no pueden revocar o modificar los permisos”.
Exhortó a la población a sumarse a esta causa hasta lograr que las autoridades respondan y se encuentre una solución “queremos que PROFECO, SAT y SCT revisen a la línea, además que se abra la puerta a otras empresas de transporte, para que haya un mejor servicio y los usuarios no sea vean obligados a viajar en unidades sucias, en malas condiciones o con tratos groseros de los choferes”, concluyó.