A la edad de 34 años fue ordenado sacerdote por San Agripino de Autun, siendo nombrado Abad de Saint-Symphorien
Nació en el año 496 cerca de Autun, Saône-et-Loire. Falleció en Paris el 28 de Mayo de 576. Estudió en Avalon y también en Luzy guiado por su primo Scapilion, quien era sacerdote.
A la edad de 34 años fue ordenado sacerdote por San Agripino de Autun, siendo nombrado Abad de Saint-Symphorien. Su virtud característica fue el amor por los pobres, manifestándose tan fuertemente su entrega por los demás, que sus monjes se rebelaron, temiendo que regalara todo lo que tenían.
Debido a que estaba en Paris en el año 555, cuando el Obispo Eusebio murió, Childebert lo retuvo, y con el consentimiento unánime del clero y del pueblo, fue consagrado a la sede vacante. Bajo su influencia, el rey, quien se había entregado a la vida mundana, se convirtió y desde entonces llevó una vida Cristiana.
En su nuevo cargo, el Obispo continuó la práctica de las virtudes y las austeridades de su vida monástica, y trabajó fuertemente para disminuir los males causados por las incesantes guerras y la vida licenciosa de los nobles. Asistió al tercero y cuarto Concilios de Paris en los años 557 y 573 respectivamente, y también al segundo Concilio de Tours en 566. Convenció al rey que erradicara las prácticas paganas que aún existían en Gaul, y también para que prohibiera los excesos que se llevaban a cabo en la mayoría de las celebraciones Cristianas.
Poco después de año 540, Childebert sitió Zaragoza mientras estaba en guerra con España. Los habitantes del lugar se habían puesto bajo la protección de San Vicente Mártir. Cuando Childebert se enteró de esto, perdonó a la ciudad, y como muestra de gratitud, el obispo le obsequió la estola del santo.
Cuando regresó a París, el rey ordenó construir un templo en los suburbios en honor del mártir, para guardar ahí la reliquia. Por ése tiempo, Childebert cayó peligrosamente enfermo en su palacio de Celles, pero fue sanado milagrosamente por el Obispo Germain, según se atestigua en la carta de patentes del rey, presentando como regalo a la Iglesia de París las tierras de Celles, como gratitud por el favor recibido.
El templo de San Vicente fue terminado en el año 588, siendo consagrado a San Vicente por el Obispo Germain, el 23 de Diciembre de dicho año, mismo día en que Childebert falleció. Cerca de éste templo se construyó un monasterio.
Sus abades tenían jurisdicción espiritual y temporal en los suburbios de San Germain hasta aproximadamente el año 1670. El templo fue frecuentemente saqueado e incendiado por los Normandos en el siglo IX. Fue reconstruido en 1014 y consagrado por el Papa Alejandro III en 1163.
Childebert fue sucedido en el trono por Clotaire, quien tuvo un corto reinado. A su muerte ocurrida en el año 561, la monarquía se dividió entre sus cuatro hijos, siendo Charibert nombrado rey de Paris. Charibert era una persona viciosa y despiadada, y el Obispo Germain se vió obligado a excomulgarlo en 568 por su inmoralidad. Charibert falleció en 570.
El Obispo se encontró con grandes dificultades debido a que en ese tiempo los hermanos de Charibert se disputaban sus propiedades. Trabajó fuertemente para establecer la paz, pero con poco éxito. Sigebert y Chilperic, instigados por sus esposas, Brunehaut y la infame asesina Fredegunde, se enfrascaron en una guerra intestina, y al ser vencido Chilperic, Paris cayó en las manos de Sigebert.
El Obispo Germain escribió una carta a Brunehaut (carta que a la fecha se conserva) pidiéndole que usara su influencia para prevenir mas guerras. Sin embargo, Sigebert era obstinado y a pesar de la advertencia de Germain se preparó para atacar a Chilperic en Tournai, donde se había escondido, pero Fredegunde lo mandó asesinar en el camino a Vitri en 575.
Germain mismo falleció al siguiente año antes de que se restableciera la paz. Sus restos fueron sepultados en la capilla de San Symphorien en el vestíbulo del templo de San Vicente, pero en 754 sus reliquias fueron solemnemente reubicadas en el edificio principal del templo, en presencia de Pepin y de su hijo Carlomagno, que entonces era un niño de siete años.
Desde ese momento, el templo se convirtió en el templo de San Germain-des-Prés. Además de la carta mencionada anteriormente, también se conserva un tratado de la antigua liturgia Gala, atribuida a Germain, que fue publicada por Martene en su “Thesauruis Novus Anecdotorum”. La festividad de San Germain se celebra el 28 de Mayo.