Fue canonizado por San Juan Pablo II el domingo 4 de mayo de 2003, durante la visita del Santo Padre a España.
El 28 de julio la Iglesia recuerda a San Pedro Poveda Castroverde, asesinado por odio a la fe durante la guerra civil española, en la primera mitad del siglo XX, y fundador de la institución Teresiana.
El sacerdote nació en Linares, Jaén (España) el 3 de diciembre de 1874, ingresó en la misma ciudad al seminario y concluyó sus estudios en Guadix, donde toma los votos como sacerdote en 1897.
San Pedro Poveda se caracterizó por su trabajo humanista y pedagógico, al vivir su ministerio en la formación de los más necesitados, como fue su servicio en la formación cristiana de los peregrinos durante su nombramiento como canónigo de la Iglesia Colegial de Covadonga (Asturias) en 1906.
A partir de 1911 comenzó la fundación de Academias y Centros pedagógicos que darían inicio a la Institución Teresiana, la cual se consolidó con la aprobación pontificia firmada por Pio XI el 11 de enero de 1924.
Sacerdote prudente y audaz, pacífico y abierto al diálogo, fue detenido el 27 de julio de 1936 en su casa en Madrid en la calle Alameda Nº 8, y entregó su vida por causa de la fe en la madrugada del 28 de julio de 1936, cuando fue fusilado en el Cementerio de la Almudena.
“Soy sacerdote de Cristo”, señaló San Pedro Poveda a quienes lo llevaban al martirio.
Fue canonizado por San Juan Pablo II el domingo 4 de mayo de 2003, durante la visita del Santo Padre a España.