Santa Zita nació cerca de Lucca (Italia) en 1218 y empezó a trabajar desde los doce años de edad.
Cada 27 de abril celebramos la fiesta de Santa Zita, patrona de las empleadas del hogar.
Ella fue una mujer de condición muy humilde, por lo que desde pequeña tuvo que trabajar como sirvienta en casa de una familia rica de su localidad.
De esa manera, Zita podía hacerse de algún dinero y contribuir al mantenimiento de su familia. Su trabajo le acarreó una serie de dificultades y penurias que ella afrontó desde su fe. Fue blanco de burlas y maltratos, pero su amor a Dios y a su familia le ayudaron a mantenerse firme, y a crecer en confianza en la providencia de Dios.
Santa Zita nació cerca de Lucca (Italia) en 1218 y empezó a trabajar desde los doce años de edad. Al final, fueron 48 largos años los que trabajó para una familia rica.