Durante los últimos tres días consecutivos, el coloso ha arrojado fragmentos balísticos por lo que se ha insistido en que la población no se acerque.
Durante tres días consecutivos, el Popocatépetl ha registrado explosiones que han derivado en el lanzamiento de fragmentos balísticos hacia sus laderas, informó Óscar Zepeda, director de Análisis y Gestión de Riesgos del Centro Nacional para la Prevención de Desastres (Cenapred).
De acuerdo con sus publicaciones en Twitter, este comportamiento inició a las 5:08 horas del lunes pasado, cuando se reportó un episodio explosivo que además de la salida de material incandescente, se observó una fumarola de 500 metros de altura.
Ese mismo día, a las 9:50 horas, el Cenapred detectó otra explosión, que arrojó una columna eruptiva de dos mil 500 metros sobre el nivel del cráter.
El martes, a las 2:31 horas, las cámaras de monitoreo nuevamente observaron el lanzamiento de fragmentos balísticos, que llegaron a una distancia de un kilómetro hacia las laderas del coloso.
Para la 1:20 horas de este miércoles, la escena se repitió y el Popocatépetl lanzó fragmentos a 600 metros de distancia, así como una columna eruptiva, cuya distancia no ha sido precisada.
Al respecto, el Cenapred señaló que este comportamiento se mantiene en el escenario previsto del semáforo de alerta Amarillo Fase 2, por lo que se pidió que la ciudadanía respete las recomendaciones de Protección Civil.
De forma específica, se recordó que el paso entre San Nicolás de los Ranchos y Nexapa, vía Paso de Cortés, se encuentra controlado y que existe un radio de seguridad de 12 kilómetros para no acercarse al cráter del volcán.