El paro en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) pudo ser un polvorín; mantener estrategias políticas y de comunicación política e institucional a la vieja usanza en nada abonaría a esta escalada de conflicto que devino en crisis pero que por el momento, ya no es una bomba de tiempo.
Por: Alesandra Martin
En tiempos de incertidumbre, los regímenes autocráticos parecen tomar fuerza ¿por qué? Porque la figura autoritaria da la percepción en el colectivo imaginario, de una imagen fuerte y por tanto, genera certidumbre ante tiempos convulsos.
En una entrega anterior, estimadísimo lector, daba cuenta del “boomerang de agitar a las masas” y escribí que despertar a las masas con discursos de odio fue fácil, lo difícil es contener el resultado de estos discursos que sembraron en el imaginario colectivo una emoción negativa, la más peligrosa de todas: la ira. La siembra está dando la cosecha: Despertar a las masas polarizadas y ahora, micro segmentadas.
El boomerang que se genera de esta cosecha puede ser una bomba de tiempo. Por ejemplo, una manifestación es un polvorín: sumemos el anonimato que dan las masas (es como ponerse una máscara, imaginemos la de V de Vendetta) más la ira cosechada. ¡Pum!
El paro en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla pudo ser un polvorín; mantener estrategias políticas y de comunicación política e institucional a la vieja usanza en nada abonaría a esta escalada de conflicto que devino en crisis pero que por el momento, ya no es una bomba de tiempo.
En el conflicto había tres escenarios a analizar:
- El movimiento y la naturaleza de éste.
- La comunicación institucional, es decir, la comunicación interna para toda la comunidad universitaria.
- Y la comunicación política, es decir, la comunicación hacia el exterior: la percepción y el alcance del mismo, la habilitación de voceros o no, el mensaje unidireccional, los mensajes pluri-direccionales, la comunicación de emociones, -entre otras muchas pero que no es menester de este escrito hacer un manual-
Los análisis de escenarios políticos y mediáticos son fundamentales, no sólo descriptivos sino los más importantes para contener una crisis son los prospectivos ya que esto nos permite generar estrategias efectivas de comunicación. A todas luces, no se hicieron y la bola de nieve comenzaba a hacerse más grande.
Complejo hacer análisis de escenarios, estrategias, mensajes, etc… complejísimo si le sumamos que la población (como lo mencioné en la pasada entrega) no sólo está polarizada sino además, ahora está micro segmentada.
La autonomía universitaria, la libertad de expresión, la construcción de conocimiento significativo, la formación de un pensamiento crítico (léase procesos cognitivos complejos) eso sólo lo puede dar una universidad pública y no es menor que esto estuvo a nada de perderse de tajo aunque el riesgo sigue latente.
Perder nuestra autonomía y todo lo que conlleva ya que las juventudes no tienen en su memoria colectiva por qué surge la autonomía en las universidades públicas y tampoco se les enseña el privilegio de ello y no se les comparte por “miedo a que piensen” o se comparte con un sesgo e intencionalidad casi maquiavélica, porque la mezquindad existe hasta en este universo libertario llamado universidad.
La contención de esta crisis obedece a varias razones; todas tienen que ver con la legitimación de este movimiento -que no así un movimiento social emergente- pero cualquiera que haya sido la causa, encendió la participación activa de gran parte del estudiantado.
Gran parte de la contención alcanzada, hasta este momento, se debió al diálogo, al respeto, al consenso, a la sensibilidad de las necesidades universales de la máxima casa de estudios. Esto inició en una sesión extraordinaria de consejo universitario, con la fuerza que da el ser la primera mujer en dirigir los rumbos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, “la luz se hizo” ante tanta confusión y obscuridad cuando esa mujer, Lilia Cedillo Ramírez, Rectora de la BUAP; se puso de pie, pidió la palabra y comenzó a hablar sin scrpit.
Sigue la información de última hora en las redes sociales de URBANO Noticias Puebla y Tlaxcala.
TE RECOMENDAMOS LEER ADEMÁS: POLITIKÓS | El boomerang de agitar a las masas