El Banco Mundial realizó una reflexión sobre los prejuicios de género en las escuelas y las aulas, y de cómo estos ahondan la desigualdad a la hora de elegir qué estudiar.
Según una publicación [1], se pueden “reforzar los mensajes que afectan las ambiciones de las niñas, sus propias percepciones de su papel en la sociedad y producir disparidades en la participación en el mercado laboral y segregación ocupacional”.
“Cuando los estereotipos de género se comunican a través del diseño de entornos de aprendizaje en la escuela y el aula o a través del comportamiento del cuerpo docente, el personal y los compañeros en la escuela, continúan teniendo un impacto sostenido en el desempeño académico y la elección del campo de estudio, afectando especialmente de manera negativa a las mujeres jóvenes que cursan carreras de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (CTIM).
Actualmente la tasa de cobertura bruta en educación superior en México pasó de 17.1% en 1997-1998 a 24.1% en 2006-2007 (con 23.5% en 2005).[2]
Otro datos recolectados por instituciones financieras, que analizan la importancia de las mujeres en el sector económico a partir de una educación igual para todos, destaca que sólo tres de cada 10 jóvenes de entre 19 y 23 años pueden cursar estudios superiores. El total del grupo poblacional que se ubica en ese rango de edades es cercano a los 10 millones, por lo cual más de siete millones de jóvenes no estudian.
Según la Encuesta Nacional de Juventud 2010, cerca de 22% de la población total entre los 12 y los 29 años de edad en México, ni estudia ni trabaja[3].
Estudios de género en relación a la vida de las mujeres en las universidades advierten sobre la desigualdad que existe en pleno siglo XXI. La Universidad Iberoamérica considera que es incompatible la vida académica con la vida reproductiva.
La UNAM hace hincapié en la falta de programas dentro de las universidades que permitan a las mujeres con hijos ir a la escuela, terminar una licenciatura, y peor, no hay espacios seguros para que se compagine la maternidad y un posgrados. Como soluciones se han propuesto guarderias, horarios especiales, pero las universidades siguen siendo pensadas solo para mujeres solteras.
Y se insiste que la universidades son un ejemplo de desigualdad, puesto que disminuye la presencia de mujeres en la transición a la maestria o doctorado, y esto todavía es peor cuando se habla de llegar a desarrollar trabajo académico y de investigación.
La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, de México (ANUIES) en su anuario 2021-2022[4] reportó que cursaron una carrera profesional, o posgrado, en las universidades afiliadas de todo el país 186 mil 176 mujeres y 154 mil 140 hombres.
Es decir, la intención de las mujeres por estudiar fue mayor. Un 54.7% de la matricula fue femenina.
También en nuevos ingresos las mujeres buscan más estar en la universidad. En el ciclo escolar anterior hubo 57 mil 531 matriculas femeninas frente a 47 mil 163 de los varones.
En las cifras de egresos, también son mujeres las que muestran mayor eficiencia terminal superando por mucho a los varones. La ANUIES cita que concluyeron su instrucción universitaria 30 mil 594 mujeres lo que equivale a 60% en comparación a la cifra de ingresos.
En los varones la eficiencia terminal fue de apenas 49%, es decir que solo concluyeron la instrucción superior 23 mil 491 hombres.
Estas cifras son reveladoras. Muestran que se requieren oportunidades para que las mujeres mantengan ese crecimiento en los objetivos educativos que son la base para romper con la desigualdad y apurar a acortar la brecha.
Igualdad de género se conseguirá en unos 300 años
Si las cosas no cambian y no se abre la educación para todas las mujeres, en donde no existan prejuicios sobre edad, situación civil o embarazos tanto en niñas como adolescentes o universitarias, la igualdad de género se conseguirá en unos 300 años, según advirtió recientemente la Organización de la Naciones Unidas (ONU)[5]. Esta afirmación de António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas fue a propósito del Día Internacional de la Mujer.
Resulta estremecedor pensar que habrá que esperar tres o cuatro generaciones más para que las mujeres y los hombres sean iguales en todos los aspectos de la vida; que los derechos de las mujeres no se supediten a leyes discriminatorias o injustas.
A mi me hace pensar en mi hija, mis nietas, mis sobrinas y la descendencia que tendremos mis hermanas y yo: No la tendrán fácil, todavía no.
La ONU y otras organizaciones enfatizan que la educación y el acceso a tecnologías son las armas de las mujeres para avanzar.
Guterres subrayó que “los avances hacia la igualdad de género se están desvaneciendo ante nuestros ojos (…) para que la humanidad alcance dicha paridad llevará unos tres siglos”.
Según la ONU Mujeres, en la actualidad solo Islandia es el país con mayor igualdad de género en el mundo.
Y el mismo organismo destaca que se requieren con exactitud de 286 años para cerrar las brechas existentes en materia de protección legal y en eliminar leyes discriminatorias y 140 años para lograr la representación equitativa en los puestos de poder y liderazgo en el lugar de trabajo.[6]
En Puebla, por ejemplo, 7% de las personas es analfabeta. Esta cifra es mayor al promedio nacional de 4.7%. Es la sexta entidad con más personas que no saben leer o escribir
En Chiapas hay 13.7% son analfabetas, el porcentaje más alto del país. De ahí le sigue Guerrero con 12.5; Oaxaca 11.8; Veracruz 8.5 y Michoacán con 7%.
En todos los casos son mujeres las que siguen más rezagadas, y la pobreza siempre es un factor que les impide educarse. Tienen que trabajar en casa o ceder su lugar para que mejor estudien los hermanos porque son varones.
Un problema complejo, vinculado con las condiciones producto de la desigualdad y la pobreza, que también han sido persistentes en el país; es la manifestación de algo más grave y profundo, de más difícil solución, es como la punta de un voluminoso iceberg.[7]
[1] Banco Mundial. (2023) Educación de las niñas. https://www.bancomundial.org/es/topic/girlseducation#:~:text=Tanto%20las%20personas%20como%20los,hijos%20suelen%20ser%20m%C3%A1s%20sanos.
[2] ANUIES (Revista de la Educación Superior No. 174) Equidad de género en la Educación Superior. http://publicaciones.anuies.mx/pdfs/revista/Revista174_S6A1ES.pdf
[3] Centro Banamex (2022). ¿Qué es el analfabetismo en México? https://www.centrobanamex.com.mx/que-es-el-analfabetismo-en-mexico
[4] ANUIES. Anuarios Estadísticos de Educación Superior. http://www.anuies.mx/informacion-y-servicios/informacion-estadistica-de-educacion-superior/anuario-estadistico-de-educacion-superior
[5] ONU Noticias (2023) Alcanzar la igualdad de género para las mujeres costará 300 años al ritmo de progreso actual. https://news.un.org/es/story/2022/09/1514031
[6] ONU Mujeres (2023) Al ritmo actual, podría llevar casi 300 años lograr la plena igualdad de género. https://www.facebook.com/watch/?v=772405713868431
[7] UNAM. Plan Educativo Nacional. https://www.planeducativonacional.unam.mx/
Autor: Guadalupe Gálvez, periodista.
Coordinación Editorial de Urbano Noticias.
guadalupegalvez78@gmail.com
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