Más de 29 años en la impunidad y olvido en la ejecución extrajudicial de luchador social
A 29 años de la ejecución extrajudicial del universitario y luchador social Gumaro Amaro, la familia acusó que la impunidad y el olvido institucional han sido las tónicas de autoridades en Puebla. Hoy nuevamente la demanda para reabrir el caso para el esclarecimiento fueron expuestos por su viuda y su hijo.
Este lunes, una vez más, María de Lourdes Ayometzi Rojas, viuda de Gumaro Amaro, recordó que su esposo fue ejecutado a metros de la puerta de su casa con nueve disparos el 17 de febrero de 1989, cuando era gobernador Mariano Piña Olaya. Un año antes, fue detenido, desaparecido, torturado y amenazado de muerte en los sótanos de la entonces Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado, hoy Fiscalía General de Estado.
A la fecha, pese a oficios, peticiones, demandas, movilizaciones, la respuesta ha sido el mutismo, incluso por José Ventura Rodríguez Verdín, actual Secretario de Gobernación quien entonces era titular de Seguridad Pública, quien inmediato a la ejecución de Amaro, aseguró públicamente que “capturar a los asesinos era la misión más importante de su vida”.
Su viuda recordó que inmediatamente después de su ejecución se realizaron acciones políticas de masas exigiendo el esclarecimiento y castigo a los culpables materiales e intelectuales de la ejecución, demandas que no han cesado pero que chocan la con indiferencia de autoridades.
“Continuamos exigiendo el esclarecimiento del caso, así como el juicio y castigo a los responsables, a la fecha, a los 29 años, el Estado se niega y brinda impunidad los responsables, nos estrellamos con una pared”, aseguró Lourdes Ayometzi.
El Frente Nacional de Lucha por el Socialismo un comunicado de hoy difundió el perfil de Gumaro Amaro Ramírez donde se señala su formación científica, artística, humanista y deportiva; estudió Antropología Social, Derecho, Economía, Artes Plásticas y practicó futbol americano y natación.
A principios de 1981, desempeñó la categoría de técnico mimeografista en la Preparatoria “Benito Juárez” a la par que estudiaba en la facultad de derecho de la UAP.
También movilizó, politizó y organizó diversos sectores populares. En el estudiantil, fundó el proyecto de casas del estudiante y la Unión Por la Organización de los Estudiantes (UPOE); en el popular, fundó el proyecto de la Unión de Amas de Casa; con obreros, impulsó la conformación del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria de la Confección (SUTIC), y con los jornaleros agrícolas de Tehuacán contribuyó al proyecto de granjas avícolas; esto sólo por mencionar los proyectos más destacados.
El FNLS consideró en el pronunciamiento que la represalia contra Amaro tuvo como objetivo detener el avance combativo de las organizaciones así como de otras expresiones de descontento popular de la época. “La ola de represión de la que formó parte la ejecución de nuestro compañero, incluyó acciones como el hostigamiento y represión al proyecto de casas del estudiante y la UPOE, los cuales fueron casi exterminados por el Estado mexicano en la década de los noventa”,
“En 2012, organizaciones populares solicitamos al Congreso del estado que coadyuvara para el juicio y castigo a los culpables de la ejecución extrajudicial de los compañeros Gumaro Amaro Ramírez y Fermín Mariano Matías (luchador social detenido-desaparecido y ejecutado extrajudicialmente en 2009). La negativa del Estado muestra que la justicia no existe para quienes luchan al lado del pueblo.
Desde 2014, se ha solicitado de manera constante a los miembros del Consejo Universitario de la BUAP que se pronuncien por el esclarecimiento de la ejecución extrajudicial del compañero universitario y luchador social Gumaro Amaro Ramírez, sin embargo, existe una feroz resistencia por parte de la administración central de la universidad, representada por el rector Alfonso Esparza Ortiz, guardián de los intereses de la burguesía en nuestra máxima casa de estudios”, refiere el comunicado.