Alejandro Gómez López y Saulo García, quienes actualmente se desempeñan como secretario y director general de Acción Juvenil del PAN Puebla, respectivamente, fueron acusados por Mónica Escalante, activista y funcionaria del gobierno municipal de San Martín Texmelucan, de violencia política en razón de género.

Lo anterior con motivo de los comentarios que le hicieron por unas firmas que se requerían para un proceso interno del instituto albiazul, señalando que supuestamente las concedió «por unos besos».

Mónica Escalante condenó el hecho referido y compartió el audio en donde se escuchan las expresiones de los líderes de Acción Juvenil, quienes incluso se adulan entre ellos.

Derivado de lo anterior, la funcionaria de Texmelucan sentenció que «no guardara silencio» y comunicó que interpondrá las denuncias formales correspondientes.

Explicó que los comentarios que le hicieron están tipificados en el artículo 20 Bis de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia.

«Que señala como violencia política en razón de género cualquier acto u omisión basadas en el género que tengan como resultado limitar, anular o menoscabar los derechos políticos y electorales de una o varias mujeres», acotó.

Sostuvo que los líderes juveniles la sexualizaron, ridiculizaron y le restaron legitimidad a su participación política al recurrir a una narrativa machista que buscó desacreditarla como persona y como mujer.

«Y no, no me voy a quedar callada, voy a presentar las denuncias correspondientes a las instancias legales y administrativas correspondientes», expresó.

Escalante también manifestó que ninguna mujer ingresa al ámbito político para pedir favores, sino por sus capacidades, remarcando que quien no entienda esto último, no debería ocupar ningún cargo político.

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