El Comité DESC-ONU en un informe detaca 240 conflictos, de estos cuatro son muy graves por el grado de devastación como el caso de lo ríos ubicados en Puebla y Tlaxcala
El Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la Organización de las Naciones Unidas (DESC-ONU), emitió ayer observaciones y recomendaciones finales sobre los informes periódicos quinto y sexto que incluyó el problema de la contaminación de los ríos Atoyac y Zahuapan.
En el capítulo sobre los derechos al agua, el saneamiento y a un medio ambiente sano consagrados en el Pacto Internacional, la ONU conoció 240 conflictos socio ambientales en México, de los que destacó el caso de la contaminación del Río Atoyac en Tlaxcala-Puebla.
El grupo de trabajo consideró a esta afluente como «uno de los ríos más tóxicos del país» debido a la descargas industriales; también valoró la contaminación de los ríos Bacánuchi y Sonora por el derrame de sulfato de cobre de la minería, la contaminación del Río Santiago en Jalisco y la contaminación de los cuerpos de agua de la Península de Yucatán por el uso indiscriminado de plaguicidas.
Al respecto, el organismo de la ONU manifestó su preocupación debido a que la falta de coordinación efectiva entre los niveles federal, estatal y municipal han impedido el acceso de agua potable de calidad y de servicios de saneamiento adecuados, lo que está afectando de manera desproporcionada a los grupos más desfavorecidos y marginados del estado.
En el documento, dado a conocer el miércoles, el Comité de la ONU expresó su preocupación por la falta de protección adecuada de los recursos hídricos debido a la contaminación, y a la falta de medidas apropiadas para el tratamiento de las aguas residuales.
Por tal motivo, el Relator Especial sobre el derecho humano al agua y el saneamiento recomendó al Estado y gobierno locales responsables, sancionar y penalizar a las empresas que contaminen los recursos hídricos, así como a establecer un sistema adecuado y sostenible de gestión y tratamiento de aguas residuales.