En el primer día del año se celebrar la Jornada Mundial por la Paz.
El Obispo de la Diócesis de Tlaxcala, Julio César Salcedo Aquino conminó a los creyentes católicos a iniciar el 2020 por un camino de oración, de recapitulación, para recibir la gracia de la conversión y cambiar sus vidas.
Ese fue el mensaje durante la homilía de año nuevo en la explanada de la Catedral de la Virgen de Ocotlán, dónde ya es costumbre que se den cita cientos de creyentes para recibir la bendición de inicio de año. Durante el sermón, el Obispo recordó que el primer día del año está dedicado a la paz, el cual es un camino de esperanza, en el que se debe avanzar a través del diálogo, la reconciliación y la conversión.
Para ello llamó a las y los feligreses a como lo señaló el Evangelio, elegir el camino de oración, de recapitulación, y que como los pastores que adoraron al niño Dios en pesebre «presentarnos como somos y decirle aquí estamos señor queremos acogerte y recibirte para tener la gracia de la conversión y cambiar la vida».
También llamó a los asistentes a acoger las tres formas de bendición, entre nosotros, unos con otros en el nombre del señor; cuando nosotros bendecimos a Dios, que es reconocer los dones que nos ha dado; y la que viene de Dios.
De esa manera conseguir la paz entre las personas y la conciencia sana, además por medio de la oración y la bendición podremos tener lo que necesitamos para la vida, pero no sólo la biológica, sino para darle sentido a nuestras vidas, de otra manera nuestra vida se vuelve efímera», sentenció.