Veterinarios y médicos humanos realizaron el primero implante, en México, de marcapasos a un perrito de raza french poodle de 9 años de edad que presentaba problemas de bradicardia.
Los dueños de Trixie habían mencionado a los veterinarios que le latía muy poco el corazón y que ya no podía realizar muchas actividades porque se cansaba, por lo que cerca de 14 especialistas unieron sus conocimientos para salvarle la vida a la perrita.
El cardiólogo y director del Instituto de Cardiovascular de Puebla, Juan Carlos Pérez, anunció que la cirugía duró alrededor de 5 horas y hubo una intervención de expertos en marcapasos.
Y se espera que los resultados de la operación sean una mejor calidad de vida y que este más activa.
El director poblano resaltó que esto se hace en países europeos y estadounidenses, y hay un antecedente en Colombia, pero en el caso de México, ellos son pioneros.
«Esto fue muy bonito porque es la primera vez que se hace en este país, todo fue una programación gratuita y todas las voluntades se sumaron, tanto de los veterinarios, como de los cardiólogos de humanos resultó en que todo fuera bueno», precisó. También enfatizó que buscan documentar el caso para publicaciones especializadas en el mundo animal, como por ejemplo abrir la posibilidad a otros tratamientos.