Activistas e investigadoras llevaron a cabo el Foro «Aborto legal y seguro» por la conmemoración por el Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro.
En el sistema educativo médico mexicano no existe una formación para el aborto; incluso el juramento hipocrático, que involucra «creencias desfasadas» o puestas en entredicho sobre la vida, trasmutó en la «objeción de conciencia», figura legal que involucra las creencias religiosas y culturales contra el derecho a la libertad de las mujeres, señaló Aurelia Flores Hernández.
Durante el Foro «Aborto legal y seguro en mi estado», la investigadora de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT), criticó que los planes de estudio de las universidades no contemplen los conocimiento teóricos y prácticos para garantizar el derecho al aborto.
Dijo que esta carencia se amplía en la enseñanza de la sociología, el trabajo social, la psicología y las ciencias sociales enfocadas al área de atención de las mujeres.
Mencionó que de acuerdo a los últimos estudios a nivel nacional sobre la actitud de los médicos frente al aborto y la objeción de conciencia, el 80 por ciento señaló que no estarían dispuestos a practicar un aborto, y más de la mitad refirió el juramento hipocrático como justificación y razón histórica.
«La objeción de conciencia es la prolongación del juramento hipocrático que, en su penúltimo renglón, refiere: ´jamás daré a nadie medicamento mortal, por mucho que me soliciten…; tampoco administraré abortivo a mujer alguna. Por el contrario, viviré y practicaré mi arte de forma santa y pura´».
Por su parte, Rosario Téxis, directora de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos de México (Ddser), y la activista Miriam Marroquín Stevenson, coincidieron en que el tema del aborto no es un problema moral ni religioso, sino de salud pública y derechos humanos de las mujeres.
«En concreto, el tema del aborto se circunscribe exclusivamente a la esfera de la libertad de la mujer, de sus derechos que resaltan por el contexto de los altos índices de muerte materna, abortos clandestinos y circunstancias socio-económicas», señalaron.
Para las defensoras de los derechos de las mujeres, lo que debe colocarse en la agenda local es la despenalización del aborto por voluntad de la mujer antes de las 12 semana de gestación, así como la creación de una educación médica para la interrupción legal del embarazo y la discusión sobre el juramento hipocrático que tiene más de dos mil 100 años.
Acotaron que «las causales que tenemos en Tlaxcala, significan un gran avance en materia de derechos, lo que hace falta es difundirlas y aplicarlas, dejar de criminalizar a la mujer en los centros médicos», dijo Rosario Téxis.
El foro se dió en el marco del Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro que se conmemora el 28 de septiembre, y a propósito de la llamada marea verde que avanza desde el sur de América para la legalización de la interrupción del embarazo.