La transformación de este país, sea cuarta o no, demanda la participación de periodistas serios, comprometidos con su oficio, con la sociedad, con la comunidad.
Desde la precampaña y antes, durante la campaña más y entre más se acerca el inicio del nuevo sexenio, se han multiplicado las citas sobre fifís y chairos, sobre todo en redes sociales, donde el odio de unos hacia otros y viceversa parece no tener fin y se agudiza todos los días.
Así la sociedad está dividida entre quienes apoyan y quienes critican a Andrés Manuel López Obrador, el próximo presidente de México. Para mi, el tabasqueño fue el mejor candidato presidencial que había entre todas las ofertas de la elección de este año. Así lo pensé en los dos procesos anteriores.
No se asuste, en el 2000 voté por Vicente Fox, digo, si de algo sirve para evitar que empiece a etiquetarme. En mi descargo también puedo decir que en las elecciones estatales recientes, emití mi voto por Rafael Moreno Valle y Melquiades Morales.
No participé en la de 2016 porque perdí mi credencial de elector. Para que confieso mis preferencias electorales, preguntará usted Y yo, pues tengo la obligación de contestarle Mi derecho a votar no limita mi profesión.
Desde que ejerzo el periodismo, desde hace más de 25 años, admito mis preferencia por uno u otro candidato o candidata, jamás por el partido Y cuando asumen el cargo, el poder asumo una posición crítica Hace unas semanas, le confieso, el director general del diario Intolerancia criticó mi posición respecto a López Obrador y expuse que desde mi perspectiva era el presidente ideal para México y que era necesario asumir una postura al respecto como periodista Pues, sí. Hay que hacerlo.
Es denigrante asumirse como periodista fifí o periodista chairo. Los periodistas somo periodistas, sin apellidos, sin adjetivos que establezcan si estamos a favor o en contra del próximo gobierno. Periodistas, señores, señoras. Si se dicen periodistas fifí o periodistas chairos están insultando al periodismo que sólo exige neutralidad a los integrantes del gremio, no visiones prejuiciosas Basta La transformación de este país, sea cuarta o no, demanda la participación de periodistas serios, comprometidos con su oficio, con la sociedad, con la comunidad.
Lo mismo hay que pensar en la aldea. Este lunes, el diario Intolerancia publicó un reportaje sobre la supuesta fortuna del diputado de Morena, José Juan Espinosa, justo el mismo día que el Congreso local aprobaría reabrir la cuenta pública del exgobernador Rafael Moreno Valle.
«Reabren cuentas de RMV: el PAN va contra José Juan», publico en portada el diario El Popular Me gustó Asumió una posición neutral, nos proporcionó los elementos necesarios para que sus lectores, para que la sociedad emita un juicio, pues, al fin y al cabo, la premisa del periodismo marca que debemos informar a la gente sobre lo que sucede en su entorno.
Sí, usted, siempre tendrá la última palabra, pero para hacerlo debe tener todos los elementos para emitir un juicio y esos elementos deben ser proporcionados por los periodistas De tal suerte que vaya desde aquí el refrendo de mi compromiso para actuar en esta ruta Que así sea.
Y recuerde: Nadie es completamente bueno, ni completamente malo