Las pacientes de cáncer de mama o de útero ahora son más jóvenes, tratándose de mujeres de 35 años cuando anteriormente los casos sobrepasaban los 50 años.
A pesar de que nueve de cada 10 mujeres saben auto explorarse los senos no acuden al médico si detectan alguna anomalía, que puede derivar en cáncer, dijo la investigadora del Centro de Investigación, Educación y Formación Docente del IMSS, María Fernández Vázquez.
Además de la desidia, otro factor que interviene para que no acudan al ginecólogo para realizarse mastografías o papanicolau, este último para detectar cáncer cérvico uterino- es la cultura machista.
Dijo que la mayoría de mujeres refieren que sus compañeros no permiten que sean revisadas por hombres, y como el sexo del médico que atiende en los servicios públicos de salud no se puede prever, deciden no asistir a consulta.
Otro dato de la investigación es que las pacientes de cáncer de mama o de útero ahora son más jóvenes, tratándose de mujeres de 35 años cuando anteriormente sobrepasaban los 50 años.
Además de la carga genética, el estilo de vida y de alimentación determina el riesgo de que una mujer pueda tener cáncer, explicó.
Es decir si una paciente tiene un familiar con cáncer, es más posible que lo padezca, y si su alimentación es deficiente y es una mujer sedentaria incrementa el riesgo, concluyó.