Víctor Sánchez Espinosa, aseguró que la sociedad es «frívola, pecaminosa e insatisfecha», disfruta de su propio bienestar y olvida a quienes sufren
El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, aseguró que se vive en una sociedad «frívola, pecaminosa e insatisfecha«, que disfruta de su propio bienestar y olvida a quienes viven sufriendo.
En la misa dominical, dijo que eso provoca que la gente siga buscando «caminos equivocados«.
«Vive una felicidad ficticia, pero cuando se comparte el sufrimiento de los pobres, de los desplazados, de los sometidos a cuotas injustas, las cosas cambian. Nos conducen a pensar que ante Dios no se darán esas diferencias ni esas desigualdades«.
El arzobispo criticó que se viva en una sociedad que descarta a personas que »ya no producen» como a bebés a través del aborto, a ancianos y a personas enfermas, por lo que, aseguró, «se vive en una cultura de muerte a pesar de que Dios es quien da la vida y quien dispone de ella».
«A propósito de la violencia, de la inseguridad, del aborto, descartar a ese ser inocente. A los ancianitos y enfermitos quererlos descartar de la sociedad, porque según la sociedad -ya no producen- esa es la cultura de la muerte», agregó.
Por ello, Sánchez Espinosa hizo un llamado para que las personas recen a Dios para que él «libre de los hombres perversos y malvados» ya que «son los que nos acosan y no aceptan la fe».
Por último, anunció el comienzo de los preparativos de las fiestas decembrinas.