Este viernes 5 de diciembre, familiares y vecinos denunciaron un hecho catalogado como ‘inhumano’, al percatarse del desalojo de doña Belarmina, una mujer de 103 años, quien fue sacada de su hogar por su propio hijo y su nieta en compañía de un abogado, asegurando presuntamente contar con documentos para tomar posesión del inmueble.
El caso generó una oleada de reclamos en la colonia, donde habitantes expresaron su sorpresa y rechazo al ver a la adulta mayor fuera de la vivienda en la que pasó gran parte de su vida. Algunos familiares afirmaron que, pese a su edad, ella se mantiene lúcida y siempre ha defendido que la casa es suya.
En medio del desconcierto, doña Belarmina reiteró que nunca firmó la venta del domicilio ni autorizó ningún traspaso. Con evidente tristeza, relató que no comprende por qué fue retirada de manera tan repentina y sin previo aviso.
Vecinos y familiares cercanos solicitaron a las autoridades municipales y estatales intervenir de inmediato, argumentando que podría tratarse de un acto de despojo y vulneración de derechos hacia una persona en situación de alta fragilidad.
Por ahora, la mujer se encuentra resguardada con una de sus hijas, mientras se espera que las instituciones encargadas revisen la legalidad del procedimiento y determinen si existen responsabilidades por posibles actos de violencia patrimonial.
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