Los casos de atenciones por agresión con arma de fuego u objetos punzocortantes, también crecieron 20% en 2018.
Mientras el número de lesionados en episodios de violencia intrafamiliar y por agresiones con armas de fuego y objetos punzocortantes va a la alza en Puebla, los datos registran una disminución en el estado de Tlaxcala.
Las estadísticas contenidas en el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud federal refieren que al cierre de 2018, el personal de este sector atendió a mil 952 personas que fueron agredidas al interior de sus propios hogares en el territorio poblano.
Dicha cifra es representa un aumento de 32.7 por ciento con relación a las mil 470 atenciones efectuadas en 2017 y en ambos años, afectaron de forma particular a las mujeres, que en 2018, protagonizaron mil 847 casos, es decir, 94.6 por ciento del total.
Además, el sector salud brindó atención a dos mil 582 personas heridas por bala o con arma blanca; lo que equivale a un crecimiento de 20.88 por ciento respecto a los dos mil 136 casos ubicados el año anterior.
En este rubro, los lesionados fueron principalmente hombres (72 por ciento). Para Tlaxcala, el escenario ha sido inverso; ya que al cierre del año pasado se tuvieron 516 personas lastimadas en situaciones de violencia física intrafamiliar, es decir, un 25 por ciento menos en comparación de las 690 atendidas en 2017.
En tanto, se contabilizaron 113 casos de heridas por arma de fuego y punzocortante, es decir, un 30 por ciento por debajo de los 162 casos registrados un año antes.