Aseguraron que los pobladores ya perciben cambios considerables tanto en el nivel de agua de pozos artesanales como en los ameyales

A casi 7 meses de estar cerrada la planta de Bonafont en el municipio de Juan C. Bonilla, los habitantes de la región ya observan beneficios en la disponibilidad del agua.

Así lo señalaron miembros del Comité “Pueblos Unidos” que el 22 de marzo bloquearon los accesos de la embotelladora a la que acusan de secar sus mantos acuíferos.



Aseguraron que los pobladores ya perciben cambios considerables tanto en el nivel de agua de pozos artesanales como en los ameyales que hay en la zona, lo que atribuyen al cese de la extracción de agua por la empresa.

Por el cierre de la empresa, estiman que el nivel del agua ha subido alrededor de 150 centímetros en algunos pozos, donde se encontraba el agua a 18 o  hasta 30 metros de profundidad.

 “Algunos ya reportan alrededor metro y medio de diferencia, de antes del cierre a ahora, pero apenas estamos documentando los testimonios para hacer una evaluación más precisa”.

Señalaron que la mayoría de pobladores ha reportado que ya tienen suficiente agua para satisfacer sus necesidades básicas, mientras que antes del cierre varios afirmaban que sus pozos estaban secos y que tuvieron que rascar más profundo para encontrar algo del líquido.

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