Miriam denunció a Ramón por abusar sexualmente de su hija de 14 años; él en venganza se llevó a la menor, a su hermana de 8 y una bebé de 1 año fruto de la violación.

Los dos abogados de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAVI) de Puebla asignados al caso de Miriam Vázquez la abandonaron a su suerte esta mañana, en medio de la desesperación de la mujer por encontrar a sus dos hijas y nieta, sustraídas hace 5 meses del domicilio familiar ubicado en Huauchinango por Ramón Caro Bones, su ex pareja.

Miriam, ahora sola, sin apoyo legal, teme por su vida y la integridad de las tres niñas, pues afirma que a Ramón solo le falta cumplir con una última amenaza: asesinarla. Ante esto pide protección al Gobierno del Estado para ella y las menores.

Esta mañana de viernes, tras deambular por más de 24 horas por oficinas en Huauchinango y Puebla, primero para asistir a la audiencia en la que un juez determinó liberar a Ramón y más tarde, en Puebla para saber el estado de la tres niñas, denunció que las autoridades la siguen revictimizando.

LEER ADEMÁS SEDIF resguarda a niñas sustraídas por Ramón; Miriam las buscó toda la noche

En el DIF nadie le dio información durante la noche y madrugada, y en Huauchinango ninguna autoridad judicial le ha querido reconocer su denuncia por Violencia Vicaria cometida por Ramón, pese a que el delito ya está tipificado y entró en vigor esta semana.

Miriam contó a URBANO Noticias, mientras estaba parada afuera de las oficinas del DIF Estatal, ubicadas frente al Templo del Señor de las Maravillas en la calle 5 de mayo, las amenazas de Ramón y el calvario vivido tras saber que Ramón salió libre con ayuda de su hermano, el juez penal de Zacatlán, Celestino Martínez Bones, y un juez de nombre Lucio León Mata.

Martínez Bones ha usado sus influencias para liberar a Ramón e impedido que Miriam tenga apoyo en su comunidad, denunció la mujer.

«Mi vida esta en peligro porque ayer pagaron, el día de ayer hicieron todo (…)  Fue lo peor la audiencia de ayer, es un acto más de corrupción (…) No me hace válido en Huauchinango la Ley que fue tipificada apenas, aquí en Puebla, como Violencia Vicaria que es lo que ese hombre esta ejerciendo en contra mía, y nadie me hace caso, nadie la toma como tal».

LEER ADEMÁS  Juez de Puebla libera a hombre acusado de violencia vicaria y violación

Ella narra también las amenazas que Ramón ha lanzado contra ella desde que fue denunciado por la violación de Andrea cuando tenía 14 años. «Todas las demás amenazas, desde golpes, desde que me sustrajo a mis niñas, todo lo ha cumplido. No se qué estén esperando las autoridades, quizás eso, están esperando eso, que el me mate para decir que sí sufrí violencia vicaria y que ahora sí hay algo que procede».

«Solo quiero que me escuchen esta vez y tomen en cuenta lo que les estoy diciendo (…) Como todas la mujeres que estamos viviendo violencia vicaria, lo único que queremos es estar con nuestros hijos.  Al final lo único que le falta por cumplir a este hombre es matarme o matar a una de mis hijas».

Las menores en cuestión son: Andrea de 16 años, Sherly de un año y Ximena de 8 años. 



La violencia institucional contra Miriam Vázquez ha sido una constante. La FGE, por ejemplo, se negó a lanzar la Alerta Amber para localizar a la niñas y en esta misma instancia le dijeron que la adolescente de 16 años se había ido con su violador por voluntad propia y que las niñas de 1 y 8 años estaban con su papá.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *