El juez determinó que no había elementos para ser procesado; desde hace varios años era buscado por las autoridades
Elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) detuvieron el pasado 3 de junio a José Inés N., alias “El Polluelo” quien era buscado por las autoridades estatales desde hace varios años, quien era cómplice de Gerardo N., alias “El Cepillo”, ambos identificados por explotar sexualmente a varias mujeres en la Ciudad de México, Puebla y otras entidades, entre ellas la víctima rescatada y ahora activista Karla Jacinto.
Dos días después, el juez Ramón Jiménez Casco, Juez Penal del Distrito Judicial de Guridi y Alcocer, quien es sobrino del magistrado y expresidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Mario Antonio de Jesús Jiménez; decretó auto de libertad en contra de este sujeto por la prescripción del delito de asociación delictuosa, y por falta de elementos para juzgarlo por el delito de lenocinio.
ANTECEDENTES
En agosto del 2019, la PGJE en coordinación con elementos de la Dirección General de Asuntos Policiales Internacionales e Interpol de la Fiscalía General de la República (FGR), lograron la captura de Gerardo N., y Leticia N., buscados por los delitos de lenocinio y asociación delictuosa desde 2014; acusados por la activista de haberla obligada a prostituirse durante cuatro años en la Ciudad de México, Jalisco, Guanajuato y Puebla luego de ser enganchada a través del enamoramiento para llevarla a vivir al municipio de Zacatelco en 2005.
Derivado de este caso, se relacionó a José Inés N., alias “El Polluelo”, quien convenció a la víctima de que Gerardo estaba muy enamorado de ella y que se quería casar, situación que reforzó el enamoramiento.
Por ello, el 2 de junio de 2020, la Policía de Investigación aprehendió a José Inés N., en Santa Cruz Quilehtla; sin embargo, el 5 de junio el Juez encargado del asunto decretó el auto de libertad por prescripción de la acción penal en el delito de asociación delictuosa y por falta de elementos para procesar por lenocinio.
Dicha determinación del juez local será apelada ante las instancias correspondientes por parte del Ministerio Público adscrito a la PGJE, especializada en el delito de trata de personas, para revertir la decisión y nuevamente reaprender a este sujeto, que ahora goza de su libertad pese a los atropellos cometidos en contra de varias mujeres que fueron víctimas de explotación sexual.