Jaime César N., quedó sentado en un banco, con la cabeza gacha y los ojos cerrados, sin alguna expresión de dolor, inerte.
Un interno del penal de San Miguel, de tan solo 20 años de edad, murió en su celda por un infarto fulminante, de acuerdo con versiones extraoficiales.
Jaime César N., tenía seis meses de haber ingresado al Centro de Reinserción Social (Cereso) por el delito de robo calificado cometido a una casa de empeño.
Según la información difundida por el reportero Odilón Larios en el noticiario Buenos Días, el joven pasó lista y 15 minutos más tarde fue encontrado en la celda número 2 del Dormitorio D.
Jaime César N., quedó sentado en un banco, con la cabeza gacha y los ojos cerrados, sin alguna expresión de dolor, inerte, por lo que se dio aviso a la Fiscalía General del Estado (FGE) para realizar las diligencias de levantamiento de cadáver.