La mayor parte la población utiliza el teléfono sin saber que generan 18 veces más gérmenes que un sanitario público.
Los avances tecnológicos facilitan mucho la vida de las personas, pero también generan riesgos.
Con la fiebre de tener un teléfono inteligente o algún otro dispositivo móvil, las personas pasan largas horas del día haciendo uso de ellos.
Por lo que si alguna vez te has preocupado por no lavarte las manos después de ir al baño, lo deberías hacer también por usar tu celular, ya que de acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los dispositivos móviles tienen hasta 18 veces más bacterias que un inodoro.
EXHORTO
El IMSS hizo un exhorto a la población para limpiar y desinfectar regularmente su teléfono móvil, por la gran cantidad de gérmenes que estos generan al utilizarlos, y más si lo utilizan en el baño.
La coordinadora auxiliar de Salud Pública del Seguro Social, Brenda Ramírez Vega, informó que las personas por lo general se resisten a utilizar los baños públicos, sin embargo cargan con el celular a todas partes, tocándolo con sus manos y rostro, sin tener en cuenta que estos aparatos acumulan muchas bacterias.
Algunas de las bacterias más comunes que se encuentran en la superficie de los celulares causan enfermedades infecciosas que se contagian muy fácilmente y algunas muestran resistencia a los antibióticos, al ser bacterias de alta infección.
La superficie tibia de los teléfonos móviles es ideal para que las bacterias se reproduzcan; algunas traspasan del móvil al dueño y si está comiendo y aprovecha para enviar un mensaje de texto, o ver alguna imagen, las bacterias pasan al cuerpo mediante la comida ya contaminada.
Para que esto no suceda, Ramírez Vega comentó que hay una sencilla solución: mejorar la higiene.
Por ello, recomendó lavarse las manos adecuadamente varias veces al día para evitar traspasar las bacterias; limpiar el celular frecuentemente con un paño ligeramente humedecido.
Además, cambiar cada cierto tiempo la lámina protectora, si es que la utilizan; mantener limpia la funda, si ya no es posible sustituirla por una nueva, así como sanitizar, lavar y asolear fundas y equipos periódicamente.
Limpiar el teléfono con papel higiénico no solucionaría nada, por lo que es recomendable hacerlo con algo que verdaderamente desinfecte el aparato electrónico, además de que no rayara la pantalla del artículo.
Así como evitar los productos de limpieza, ya que contienen químicos que dañan la pantalla y la salud.