Se busca que el personal tenga un trato digno en todos los niveles de atención hacia la embarazada, ya que las mujeres podrían escuchar algún comentario que la afecte
Para garantizar una atención digna a la mujer embarazada en los siete Hospitales Rurales y en las más de 300 Unidades Médicas Rurales del Programa IMSS-Prospera, personal operativo participó en el Curso-Taller Prevención a la Violencia Obstétrica, mediante el cual, se abordaron temas sobre el buen trato, derechos de la mujer en la etapa de gestación, parto y puerperio.
Al clausurar este evento, el delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla, Yamil Melgar Bravo, puntualizó que este tipo de acciones pretenden sensibilizar el trato que se le debe dar a la mujer embarazada y en lo general a todas las personas que acuden a las instalaciones a solicitar algún servicio.
Asimismo, invitó a que los conocimientos adquiridos se compartan con los demás compañeros para que se genere un ambiente de calidez entre los prosperahabientes y el personal de las diversas unidades médicas y hospitales.
Dijo que actualmente existen más médicos, mejor infraestructura hospitalaria y los insumos necesarios para la atención adecuada, “lo que nos compromete a brindar un buen trato que representen menores riesgos para el paciente”.
A su vez, la supervisora delegacional de Enfermería de IMSS-Prospera, Ana Luisa Guzmán Rodríguez, detalló que en esta ocasión se capacitaron a 141 personas que vienen de La Ceiba, Chignahuapan, Ixtepec, Zacapoaxtla, San Salvador El Seco, Tepexi de Rodríguez y Chiautla de Tapia, con lo que se abarcan las cuatro regiones de la entidad poblana. La Delegación es la cuarta en recibir este taller.
Mencionó que este taller busca que el personal tenga un trato digno en todos los niveles de atención hacia la embarazada, ya que se percibe que en algún momento de esta etapa las mujeres podrían escuchar algún comentario que la afecte de manera aním
Finalmente, el gerente del Programa, Aarón Pérez Cabrera, señaló que se debe mejorar la relación médico-paciente, no sólo con la mujer embarazada, sino con la población en general y que acude en un momento complicado de salud, por ello, se debe procurar empatía, pensando que el médico atiende enfermos y no enfermedades.