OMPRI demanda que para las elecciones del 2021 sé den garantías para las mujeres que desean competir por un cargo de representación popular.
Puebla ocupa el primer lugar con 89 casos de violencia política de género que se vivieron en 2018, cuando se eligieron alcaldes, regidores diputadas locales y legisladoras, señaló la titular del Organismo Nacional de Mujeres Priistas (ONMPRI) en el estado, Sandra Montalvo Domínguez.
En el encuentro con los medios de comunicación, explicó que el análisis fue realizado por el PRI en todos los estados del país, principalmente en aquellas demarcaciones donde hubo votaciones concurridas en 2018.
Puntualizó que en Puebla se registraron un total de 89 casos, seguido de Guerrero con 69; Oaxaca con 54; Ciudad de México con 46; Veracruz con 44; Michoacán con 37 y el resto en otras entidades.
Argumentó que estos casos de violencia no solo corresponden al PRI, sino a todas las fuerzas políticas que tienen presencia en el territorio poblano, que por eso la importancia de que los diputados locales tipifiquen la violencia política de género.
Puntualizó que en Puebla existe un manual para atender algunas recomendaciones sobre la violencia política de género, que no es suficiente para erradicar esta situación que se vive en el estado.
Dijo que para 2021 habrá elecciones intermedias y se necesitan garantías para las mujeres que desean competir por un cargo de representación popular, luego de que la ley fija el 50 por ciento de las candidaturas para el sector.
“Esto implica que tomemos acciones para abatir esta problemática, debemos sancionar y erradicar la violencia, porque en 2021 tendremos otra vez elecciones donde participarán un gran número de mujeres”.